La UMA subvenciona el coste de matrícula a 500 estudiantes como consecuencia de la Covid-19

Para hacer frente a las consecuencias sociales y económicas de la pandemia, la Universidad de Málaga puso en marcha una serie de acciones para apoyar a sus alumnos, entre las que se encuentra esta ayuda de emergencia, que ya se contemplaba para otras situaciones especiales. Tras la pandemia, la UMA acordó ampliar el plazo de solicitud de estas ayudas y contemplar el caso específico de circunstancias excepcionales originadas a raíz de la crisis sanitaria provocada por la Covid-19. En condiciones normales, la ayuda de matrícula se solicita hasta finales de enero. En las actuales circunstancias, la UMA acordó una nueva convocatoria, que finalizó el 31 de mayo.

Además de la subvención para la matrícula, la UMA concede otras ayuda a alumnos con pocos recursos para el alojamiento o la manutención.

Otras de las medidas puesta en marcha por la UMA para paliar en lo posible las consecuencias de la pandemia ha sido autorizar la anulación de matrícula en los casos relacionados con la crisis sanitaria.

Por una parte, se ha admitido esta solicitud si la causa alegada es la imposibilidad de cursar las enseñanzas por vía electrónica por no disponer de los medios materiales necesarios. También que la causa alegada sea que no se está prestando el servicio docente de forma electrónica. En este caso, se pedía al departamento que corrobore esta situación, siendo aceptada la solicitud si el departamento confirma la no prestación del servicio. También se han contemplado los casos de trabajos fin de grado y de máster y las prácticas externas, cuyo periodo lectivo se hubiese ampliado (hasta el 18 de diciembre, como máximo).

En este sentido han sido 442 matrículas las que se han anulado. Además de recuperar el dinero de la matrícula de las asignaturas anuladas, al estudiante no le computarán a efectos de aplicar el recargo en la próxima matrícula.

Otra de las medidas de apoyo social tomadas por la UMA ha sido aplazar el pago de la matrícula de los alumnos que habían solicitado el fraccionamiento en ocho mensualidades, que se abonan en este caso entre los meses de noviembre y mayo. En este curso, un total de 6.314 estudiantes optaron por la modalidad de pago aplazado. La Universidad de Málaga no ha pasado el recibo correspondiente a los meses de marzo y abril, y también se aplazó, el correspondiente al mes de mayo.

Para resolver el pago de los precios públicos por matrícula que quedan pendientes, la Universidad ha establecido dos supuestos. Para los alumnos que no han solicitado la beca de cohesión social, ni la ayuda de emergencia, se pasará el recibo por las cantidades pendientes a finales de este mes de junio. No obstante, se permite también el pago único antes de esa fecha, si es que no quieren demorarlo hasta junio. Y para los alumnos que hayan solicitado la beca de cohesión social o la ayuda de emergencia, se aplaza el pago hasta que la solicitud de cualquiera de estas dos ayudas no esté resuelta. El importe final adeudado, después de deducir el importe de la beca de cohesión social o de la ayuda de emergencia concedida, se pasará al cobro en dos recibos, uno a finales del mes de junio y otro a finales del mes de julio, cada uno de ellos por el 50% del importe final.