El Unicaja calibra su resaca copera ante un Girona que abre un mes de marzo sin cuartel

Esta cantidad de partidos pondrá a prueba a un grupo mermado por la baja de Djedovic y que es una incógnita cómo responderá a nivel mental tras el torrente emocional que ha recibido por la conquista de la Copa. Podría darse cierta relajación por haber logrado un gran objetivo, pero también podría darse el caso de que sea una inyección extra de moral para encarar lo que falta de la temporada.

Además, también está la incógnita de ver cómo responde el físico de los jugadores, que han tenido una semana de descanso y deberían llegar frescos a este tramo de la temporada tan exigente. El partido de esta tarde es el primero de los cuatro de Liga que tendrá el Unicaja en marzo. Le seguirán los del UCAM Murcia, Barcelona y Betis, con sólo uno en casa frente al cuadro azulgrana. En la Champions la próxima semana habrá un doble duelo contra el Galatasaray, martes y jueves, antes de cerrar el Top 16 frente al Limoges y el AEK.

Este particular atracón de partidos se abre hoy ante un Girona muy mejorado respecto al comienzo de la temporada cuando los dos equipos se vieron las caras. El conjunto que dirige Aíto García Reneses ha superado el proceso de aclimatación a la Liga ACB tras el ascenso y llega a Málaga en buena dinámica después de haber ganado cinco de los últimos siete encuentros. Si el Unicaja puede acusar ese cansancio físico y psicológico de la Copa, a su rival puede pasarle factura la inactividad. Su último encuentro fue el 11 de febrero cuando se impuso de forma clara en su pista al Obradoiro. Mucho tiempo sin competir.

La figura de Marc Gasol capitalizó el juego del Girona en el arranque de la temporada, pero el equipo de Aíto ha ido creciendo y no depende ya tanto del talento del internacional español, que reaparecerá en Málaga tras una lesión, de hecho al Obradoiro le ganó sin él. Jugadores como Roko Prkacin y Dusan Miletic han evolucionado bastante adaptándose a la Liga, mientras que veteranos como Collom o Garino están ofreciendo un buen nivel. Como un ritmo alto de juego, el Girona exigirá al Unicaja que sea capaz de igualar esa intensidad, aunque el conjunto malagueño es en este escenario donde mejor se desenvuelve.