Kalinoski: «Me siento más cómodo liderando desde el ejemplo que con la palabra»

–¿Cómo está?

–Todo bien.

–En lo personal, ¿cómo valora su temporada? Se le ve más físicamente más fuerte y está tomando más responsabilidades este año.

–Me siento bien en general. Creo que tuve un buen verano en términos de ganar peso, ganando algo de músculo. Quizá no estoy en mi mejor momento atlético, como mi primer año aquí, pero sí entiendo el juego mejor que nunca. Era una gran prioridad para mí. Creo que he tenido un buen comienzo de temporada. El inicio en la ACB no ha sido tan bueno, pero fuimos capaces de ganar otro campeonato. Hemos perdido cinco compañeros y va a tomar tiempo encontrar nuestro ritmo, encontrarnos como equipo. Ya no somos el equipo que éramos antes, aunque nos estamos acercando lentamente. Estamos empezando a entendernos mejor. Con suerte podemos continuar así en el futuro.

–La realidad del equipo ha cambiado este año.

–La llegada de cuatro nuevos chicos y la salida de otros cinco hace que no seas el mismo equipo. Y no puedes tener los mismos sentimientos, las mismas metas o la misma perspectiva. Tienes que cambiar. Porque hay cambio. Así que creo que tenemos que adaptarnos, como todos los equipos cada año tienen que hacerlo. Tenemos un buen núcleo de chicos de estos últimos años y creo que estamos ayudando a los nuevos. Estamos empezando a conseguir ese ritmo.

–En ese contexto, ¿cuál es el rol de los veteranos? Usted es uno de los hombres fuertes del vestuario.

–Sí, nuestro papel para empezar es liderar. Y creo que todos tienen una manera diferente de hacerlo. Hay algunos que son más elocuentes y vocales. Y tenemos que ser así, decirle a los chicos lo que hacemos aquí, cómo lo hacemos y lo que esperamos de cada uno. Y luego también tenemos que dar el ejemplo. Así que en la práctica tenemos que trabajar duro todos los días y hacer las cosas bien. Esa es nuestra forma de ayudarlos.

–¿Qué tipo de líder es Tyler Kalinoski?

–Me siento más cómodo y más fuerte liderando desde el ejemplo que desde la palabra. Pero he hablado con el entrenador y una cosa que me ha dicho es que puedo hablar y ejercer también con la palabra. Y creo que lo he hecho un poco. Definitivamente me siento como un veterano tras estar aquí tanto tiempo.

–No ha tenido mucho acierto desde el perímetro en este arranque de temporada, aunque el otro día por fin le entraron los triples. ¿Se siente liberado?

–Siempre es bueno ver que la pelota va dentro. Me entraron en Singapur y también en la Champions, así que no es que no me sentí bien o mal. Es lo que he tenido toda mi vida. Es como si tuvieras que ser un pez dorado: tienes que tener una memoria corta, ¿verdad? Si la pelota no entra, tienes que olvidarlo por completo. Y tienes que asumir y estar seguro de que el siguiente tiro va a entrar. Desde fuera la gente podría pensar 'Oh, no las mete', pero por dentro siempre pienso que el siguiente tiro va dentro. Así que voy a tirar de todos modos. Y con confianza.

–Algunos entrenadores, como Pablo Laso, han afirmado en alguna ocasión que si pudieran fichar a algún jugador del Unicaja, se llevarían a Kalinoski. ¿Cómo le sienta eso?

–Laso es un gran entrenador. Ha estado en la cima y ha ganado campeonatos. Que alguien te reconozca siempre sienta bien. Durante gran parte de mi carrera, personas y entrenadores me han calificado como un tirador. Ibon fue la primera persona en entender que aparte de eso puedo hacer muchas más cosas para ganar. Creo que Laso también ha sido capaz de verlo.

–¿Tuvo ofertas para salir del Unicaja el pasado verano?

–No lo creo, pero no tengo ni idea. No hablé demasiado con mi agente. Estoy súper feliz donde estoy y no quería ir a ningún otro lugar.

–¿Han cambiado cosas para usted de la pasada campaña a esta?

–Que he tratado de mejorar mi español (ríe). Intento escribir y leer cosas en español todos los días.

–¿Echa de menos a lo que salieron este verano?

–Para nada... (sonríe). Son como familia, como hermanos. Nos mensajeamos. Es genial verlos a todos hacerlo bien y teniendo éxito. Claro que los echo de menos. Siempre hicieron que el vestuario fuera divertido, que entrenar fuera divertido todo el tiempo.

–¿Y qué tal los nuevos? ¿Cree que Castañeda se adaptará finalmente al equipo?

–Por supuesto. Trabaja muy bien todos los días. Siempre está en el gimnasio temprano y tirando, tratando de mejorar. Es un gran tipo y se lleva bien con todo el mundo. Nos divertimos. Así que, sí, creo que puede integrarse y estará bien.

–¿Qué es lo que más le ha sorprendido de ellos?

–La facilidad que han tenido para encajar en el grupo y el talento que tienen. De Duarte me ha sorprendido mucho la facilidad que tiene para conseguir el tiro que quiere. Es impresionante.

–¿Conoce a Rubit?

–Creo que jugué contra él cuando estaba en Bamberg y yo estaba en Amberes. Creo que nos enfrentamos la Final Four de la Champions. Luego ha jugado en la Euroliga. Lo recuerdo como un buen jugador y, por lo que he oído, también es un buen tipo. Estoy emocionado de tenerlo aquí pronto.

–¿Cómo es la gestión de las expectativas para el equipo?

–Para nosotros, como equipo, no es tan difícil. Hemos trabajado en eso. Hemos tenido reuniones y sesiones de 'coaching'. Para nosotros es mucho más fácil de lo que se piensa fuera. Hay que darse cuenta también de que lo que pasó la pasada temporada no sucede. No es lo habitual. Tuvieron que pasar años para que yo ganara mi primer campeonato como profesional. Es raro. Tenemos metas y objetivo que cumplir y queremos hacerlo. Conocemos nuestro nivel de habilidad. Sabemos lo duro que trabajamos. Vamos a seguir yendo a por todos los trofeos que podamos, pero vamos a tener que encontrar nuestra propia nueva forma de hacerlo. No puede ser de la misma que el año pasado.

–¿Entiende las dudas de algunos aficionados?

–Absolutamente. Es lo que tienen que hacer. Ellos quieren ver victorias. Y cuando tú no ganas, ellos empiezan a señalar. Es normal. Es lo que pasa. Sabemos eso. Pero luego despegas, dejas esa racha atrás y todo vuelve a estar bien.

–¿Va a ser más difícil ganar la BCL esta temporada?

–Buena pregunta... Supongo que sí. El año pasado ya lo fue. Creo que es muy, muy difícil ganar un campeonato justo después de haberlo ganado. Los rivales juegan contra nosotros sabiendo que no tienen nada que perder. Este año hay que añadir al Gran Canaria, un buen equipo, y al Joventut. Y luego el AEK, el Galatasaray... Será difícil porque hay mucho talento, pero vamos a darlo todo en cada partido.

–Queda mes y medio para que acabe el año... ¿qué le pide al 2026?

–Mi mayor deseo es aprender a hablar bien español. Y ojalá que hagamos otra temporada sensacional.

–¿Cambiaría algo de su pasado?

–No, porque las decisiones que he tomado son las que me han traído hasta aquí. Tuve un par de malas temporadas como profesional y también he estado en peores lugares, pero nunca cambiaría nada porque gracias a eso estoy aquí. Creo que también disfruto más de las cosas porque he pasado por eso. Y cuando perdemos, aprendemos. Se vio cuando perdimos la Final Four de la BCL en nuestra casa y también con la Copa.