El Carpena nunca le falla a la selección

El gran partido fue un reclamo para aficionados de toda Andalucía y de fuera de España que aprovecharon el fin de semana para acercarse a Málaga. Desde primera hora de la tarde y eso que el encuentro era a las 21.00 horas, las gradas del pabellón ya registraban un ambiente excelente. El choque entre Francia y Lituania, ganado por los galos, fue el aperitivo del choque por el título.

Los aficionados arroparon a los jugadores de Javier Zamora desde que hicieron aparición en la pista para el largo calentamiento. También fue especial las presentaciones, con una gran ovación al malagueño Álvaro Folgueiras, que fue aclamado. Muy especial fue la ceremonia de los himnos de los dos países, algo poco habitual de ver salvo en estos partidos internacionales y que confiere a los mismos una connotación especial. El sensacional arranque del equipo español ayudó más todavía para encender a un público entregado.