Fin a una maldición de otra época

Aquel cara a cara entre David y Goliat abrió también una rivalidad que se fue fortaleciendo con el paso de las temporadas. Aquella final de liga fue el primer gran paso deportivo del club malagueño, que luego confirmó un crecimiento económico gracias al apoyo de Unicaja Banco. Sin embargo, tanto el Real Madrid como el Barcelona entraron en una guerra presupuestaria que casi hacía imposibles las sorpresas en serie largas como las del play-off. Tres veces se habían enfrentado en cuartos de final, seis en semifinales y una en una final. En todas ganó el Barcelona, hasta ahora.

Todos esos duelos tuvieron un denominador común, que el conjunto azulgrana siempre tuvo el factor campo a favor. Este aspecto no ha sido determinante ahora, pues los dos equipos ganaron en la cancha contraria, pero sí ha permitido al Unicaja contar con el apoyo de su público en el choque definitivo. Al amparo del Carpena, el Unicaja puso fin a la maldición y relanza sus expectativas para pelear por el título de Liga. Espera el Madrid. Otro ogro...