Un asterisco en el contrato de Ferrari para el futuro

Meses después el Gran Canaria vive un incendio detrás de otro, ha cambiado a la mitad del equipo, la plantilla ha protagonizado enfrentamientos públicos con Fisac, se pide la destitución del técnico y del director deportivo, no va a jugar la Copa y todo son dudas. De allí pidió salir Frankie Ferrari justo en el momento en el que el Unicaja se encontró con dos grandes problemas, como son las lesiones de larga duración de Alberto Díaz y Gal Mekel.

Hubo otros ofrecimientos, pero el estadounidense con pasaporte italiano se ajustaba a las necesidades. Venía en forma, en dinámica de competición y aceptó un contrato temporal. Perfecto.

Ferrari debutará este martes ante el Urbas Fuenlabrada para aliviar las necesidades de un Unicaja gafado por las lesiones. El base aceptó un contrato de dos meses y el club se reservó la opción de prorrogar ese acuerdo. Pero cara al futuro hay un asterisco. Si Ferrari y el Unicaja siguen de la mano, el base no podrá jugar ante su exequipo, es lo que se denomina 'cláusula del miedo'. Es algo poco habitual en el mundo del baloncesto, pero el Unicaja la aceptó porque es improbable que lo renueve, pues en enero estarán de regreso Mekel y Díaz. El Unicaja Gran Canaria está fijado para el 13 de marzo. La decisión del conjunto amarillo sólo se entiende dentro de la inseguridad de sus últimos movimientos, lo que explica su errática temporada hasta ahora.