Andalucía marca la hoja de ruta para atraer a 30 millones de turistas en 2020

El evento llenó el salón de actos de la sede de Turismo Andaluz de profesionales del sector de toda la región, que acogió con ilusión y entusiasmo este camino ahora por desarrollar. Y es que para alcanzar el reto final, el plan contempla cinco estrategias, que se desgranarán en cincuenta líneas de actuación y se concretarán en 2.000 acciones de promoción hasta el 2020. Los objetivos pasan por alcanzar los 30 millones de viajeros en cuatro años, con subidas anuales medias del 2%. También por aumentar en un 3,5% al año el número de turistas en temporada baja y crecer un 5% la tasa media anual del número de viajeros procedentes de mercados prioritarios, así como mejorar la posición competitiva en los emergentes. Además de mejorar el equilibrio territorial, de forma que el interior y las capitales de provincia acaparen el 40% de los viajeros, y apostar por la transformación digital de las pymes turísticas a través de la innovación e investigación.

El consejero se mostró convencido de que se trata de un documento clave, en el que han participado más de 300 profesionales que han sugerido medio millar de iniciativas, para consolidar el buen momento del sector turístico andaluz y para avanzar hacia un destino competitivo e inteligente.

En la presentación insistieron en que para mantener el éxito internacional actual de los destinos andaluces hay que reinventarse y trabajar todos juntos con un objetivo en común. Este plan los aúna tras realizar un exhaustivo análisis de veinte mercados que ayuda a dar la idoneidad de las actuaciones en cada uno de los países. «La inercia no nos mantendrá en la privilegiada posición de estos momentos. Hay que avanzar, y la productividad debe canalizarse con la innovación y el conocimiento», dijo el consejero, que recalcó que se pretende potenciar la generación del negocio y que el beneficio repercuta en la generación de empleo estable y de calidad. «Es un día importante porque presentamos un camino que construimos con consenso, porque si queremos llegar lejos, mejor juntos», dijo.

Este proyecto que marcará el futuro más inmediato reúne en cinco bloques de estrategias un total de 50 líneas de actuación para alcanzar los objetivos marcados, que incidirán tanto en la oferta, para la mejora de la competitividad del destino y las pymes, como en la demanda, dirigiéndose a los profesionales y a los consumidores finales.

Fernández destacó que este proyecto tiene un carácter dinámico y adaptable a los cambios del entorno. Para ello se ha previsto implantar un sistema de indicadores turísticos que permita hacer un seguimiento continuo y reorientar las actuaciones. «Queremos posicionar a Andalucía como principal destino experiencial del mundo por la riqueza, autenticidad y seguridad. Queremos crecer en volumen, en estancias y en gasto medio para tener más ingresos y crecer en empleo. Hay que maximizar el aprovechamiento de nuevos mercados y potenciar la comercialización de Andalucía bajo el lema de un destino que tiene de todos y para todos durante todo el año. El reto es promover Andalucía como un destino único, una meta que requiere un cambio de mentalidad de los actores de una industria que no se detiene y que obliga a ir un paso por delante para ser más competitivos», relató.