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Antonio Jesús López, Rafael Heredia y David Téllez son los tres bomberos que se han convertido, desde esta pasada madrugada, en los ángeles de la guarda de un perro callejero que había quedado atrapado en una celosía de hormigón situada en un muro en la calle Barqueros de Vélez-Málaga. El animal, que no tenía dueño, tenía la cabeza completamente metida en uno de los agujeros de la tapia en la que acaba esta vía situada en la zona del Romeral, próxima al parque de bomberos de la capital de la Axarquía.
El aviso les llegó a través de la Policía Nacional. Eran alrededor de las 1.30 horas de la madrugada de este martes cuando los tres bomberos llegaron al lugar. «Vimos que la única forma de sacarlo era rompiendo con un martillo y un cincel, lo mínimo imprescindible del muro, y así lo hicimos, en apenas tres minutos estaba el animal fuera, sin heridas», ha explicado López, quien ha destacado que a pesar de la tensión de la situación el can se comportó «de maravilla». «No nos gruñó ni nos sacó los dientes, creo que era consciente de que estábamos allí para ayudarle», ha expresado.
Los agentes policiales habían colocado previamente una rueda de coche para evitar que el animal estuviera con el cuerpo demasiado erguido. «Es probable que estuviera persiguiendo a algún gato y por eso metió la cabeza por ahí», ha especulado el bombero veleño, quien ha dicho que el perro fue trasladado posteriormente a dependencias de la Policía Local para averiguar si tenía microchip y, en ese caso, localizar a los posibles dueños. «Aparentemente no tenía, porque iba sin collar, y tenía algunas garrapatas», ha apostillado.
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