Encuentran a un fugitivo escondido en el canapé de una cama en un piso de Carretera de Cádiz
La madre del prófugo intentó engañar a los policías que intervinieron y les dijo que su hijo había huido por una ventana de la vivienda, situada en la cuarta planta de un bloque
Cuando entraron en la vivienda, la madre del hombre al que perseguían les aseguró que su hijo no estaba en la casa. Dijo que se ... había marchado por una ventana del piso, situado en la zona de Carretera de Cádiz. Sin embargo, era mentira. Según han informado las fuentes consultadas por este periódico, el fugitivo aún seguía allí dentro. En concreto, escondido en el interior del canapé de una cama, donde fue hallado por los agentes y detenido.
Publicidad
Los hechos tuvieron lugar el pasado jueves 21 de abril. Por la tarde, una dotación del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga, cuyos agentes trabajan vestidos de paisano, participaba en un dispositivo para localizar a un prófugo.
Sabían que sobre él pesaban varias requisitorias de diversos juzgados y que el hombre, de nacionalidad española y de 32 años de edad, se movía por la citada zona. Así que se desplegaron por la zona y solicitaron la presencia de una patrulla uniformada en las proximidades, en previsión de que el individuo se diera a la fuga si lo localizaban.
No se equivocaron. Sobre las 18.30 horas vieron al sospechoso, que se encontraba en una plaza de la zona. Iba acompañado por su pareja sentimental y por el hijo de ambos.
Tras localizarlo, de forma separada y disimulada, los policías locales se dirigieron hacia él. Pero al darse cuenta de que en la zona había una patrulla uniformada, el hombre se dio rápidamente a la fuga.
Según han precisado las mismas fuentes, el individuo comenzó a correr, mientras los agentes del GIP le seguían los pasos. Pese a que se identificaron como policías y le dieron el alto, el sospechoso no se detuvo.
Publicidad
Lo siguieron a la carrera de cerca y observaron como el hombre se metió en un piso. La puerta se cerró justo delante de los policías locales, sin que les diera tiempo, solo por unos segundos, a alcanzar al prófugo.
Rápidamente dieron aviso a sus compañeros y se estableció un dispositivo para arrestar al fugitivo. Entre otras dotaciones, se movilizó al Grupo Operativo de Apoyo (GOA), que se trasladó hasta el inmueble.
Publicidad
Además, la pareja del sospechoso también llegó a la casa. Las mismas fuentes han manifestado que fue ella la que permitió entrar en la vivienda a los policías locales.
Allí les recibió la madre del prófugo, una mujer de 57 años de edad y de nacionalidad marroquí. Fue ella la que aseguró que su hijo no estaba en la casa, de la que aseguró que se había escapado por una ventana.
Pero los agentes no la creyeron. Era un cuarto piso, así que los policías locales comenzaron a revisar la vivienda. Lo hicieron con la máxima precaución ante el temor de que el sospechoso pudiera estar atrincherado y armado.
Publicidad
Finalmente, lo encontraron escondido en el interior del canapé de una cama y se procedió a su detención. Los agentes comprobaron entonces la larga lista de requisitorias que el hombre tenía en vigor, en relación a delitos como quebrantamiento de condena, lesiones o robo con fuerza.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión