Cinco detenidos por el crimen de un vecino holandés de Mijas, hallado con un tiro en la cabeza en Chiclana

Tras las pesquisas realizadas, los agentes concluyeron que los cinco arrestados participaron de distintas formas en la ejecución del finado, al que relacionan con un caso de narcotráfico de la «mocro maffia holandesa». Según precisaron las fuentes consultadas por este periódico, la víctima contaba con un amplio historial delictivo por su vinculación a la mafia y al tráfico de drogas.

En un primer momento los investigadores barajaban la hipótesis de que su asesinato hubiera sido encargado como represalia por una declaración que prestó y que ayudó a meter entre rejas a un capo de la organización criminal holandesa, siendo esta la causa por la que, al parecer, el asesinado acabó trasladándose a la localidad de la Costa del Sol.

Sin embargo, conforme se fue avanzando en las indagaciones, la teoría de que el crimen estaba directamente relacionado con desavenencias relacionadas con el tráfico de sustancias fue cobrando fuerza. De hecho, de acuerdo con las mismas fuentes, el último viaje que realizó el ciudadano holandés fue a Francia, donde se habría reunido con los dos sospechosos de su asesinato.

El vehículo que fue encontrado en llamas en Chiclana de la Frontera fue el mismo que alquiló en compañía de dos de los detenidos y desde el que los tres se desplazaron para llegar a la Costa del Sol desde la República Francesa, según pudo saber este diario. De ahí se trasladaron a la localidad gaditana en la que la víctima fue encontrada con un disparo en la cabeza.

Los supuestos implicados en su homicidio, tras la ejecución, llevaron el automóvil que habían utilizado en el viaje a un lugar apartado del municipio y le prendieron fuego con el fin de eliminar pruebas, lo que dio las primeras pistas a los investigadores de que se encontraban ante verdaderos profesionales del crimen.

El cuerpo del hombre fue descubierto por una mujer el pasado 15 de enero, cuando salió a pasear con su perro por la zona de Pago del Humo, dando rápidamente aviso a los servicios de emergencia. Cuando se identificó al finado, los investigadores descubrieron que su desaparición había sido denunciada por una persona de su entorno en la comisaría de la Policía Nacional en Fuengirola.

Detenciones

Los registros y las detenciones se han llevado a cabo en Chierry (Francia), en las localidades malagueñas de Benalmádena y Alhaurín el Grande, y en los municipios gaditanos de Guadiaro, San Martín del Tesorillo y Chiclana, contando además con la colaboración delas autoridades judiciales y policiales de Holanda y Francia.

Tras identificar y localizar a los presuntos implicados, los guardias civiles asignaron a cada uno de ellos el rol que supuestamente desempeñaban en la organización. Finalmente, dos quedaron arrestados como supuestos autores del asesinato, así como por delitos de pertenencia a organización criminal, tenencia ilícita de armas y daños.

Los otros tres individuos fueron detenidos como investigados por un posible delito de encubrimiento, ya que habrían actuado como cooperadores o colaboradores necesarios para llevar a cabo el crimen. Durante los registros realizados en el marco de esta operación también se han incautado varios dispositivos móviles, documentación y material informático de interés para esclarecer por su relación con los hechos investigados.

La investigación y actuación policial, que ha corrido a cuenta de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Cádiz, ha contado con el apoyo de diversas Unidades de las Comandancias de Cádiz, Algeciras y Málaga además de la Unidad Técnica de Policía Judicial, Grupo de Acción Rápida, tutelada por la titular del Juzgado Mixto nº 1 de los de Chiclana y coordinada con la Fiscalía de Cádiz.

También se ha desarrollado con la colaboración de Europol, así como de las autoridades judiciales y policiales de Francia y Holanda.