«Estudiar el Máster de Desarrollo de EVAD me ha descubierto mi verdadera vocación y me ha abierto las puertas del mundo laboral»

Marina Barba es una de las alumnas que se ha formado en EVAD, un Campus Tecnológico a la vanguardia del sector con titulaciones que abarcan todas las ramas de la industria de los videojuegos

Martes, 15 de junio 2021 | Actualizado 16/06/2021 09:21h.

Marina Barba llegó al mundo de los videojuegos casi por casualidad. Licenciada en Comunicación Audiovisual, mientras estaba estudiando la carrera se interesó por esta industria, en la que solo había participado como aficionada.

«Una compañera comenzó a estudiar el Máster en Diseño y Desarrollo de Videojuegos de EVAD, que acababa de empezar a impartirse, me interesó y eso me llevó a investigar», explica.

A través de esa investigación indagó sobre las pocas escuelas en España en las que podía realizar una formación similar, «y ninguna tenía el programa y la metodología de EVAD», subraya. También visitó Gamepolis y Freakcon, las ferias del videojuego y de la cultura popular, respectivamente, que organizan desde la escuela y en la que incluyen stands informativos.

«Después de empaparme bien, comparar y analizar todas las posibilidades vi que era la mejor opción y me decidí a estudiar el Máster de Desarrollo. Al principio tenía un poco de miedo por el tema de la programación, porque vengo de un área muy diferente. Pero lo cierto es que la formación de EVAD está pensada para que cualquier alumno pueda seguirla de manera progresiva y no sean necesarios conocimientos previos. Además todo el equipo docente se vuelca para ayudar», comparte.

Una vez finalizada, quiso seguir especializándose y optó por hacer el Máster de Technical Artist en Unreal Engine, uno de los motores gráficos más potentes del mercado y utilizado principalmente en videojuegos AAA (superproducciones de gran calidad y gran presupuesto).

Este motor se emplea también en cine y televisión, lo que «enamoró» a esta graduada en audiovisuales. Además, aunque es el más utilizado en numerosos países, en España aún hay poca gente experta en su desarrollo, por lo que es un nicho de mercado por explorar.

Gracias a su habilidad técnica, compromiso con el trabajo y experiencia acumulada, Marina fue 'fichada' como profesora en la escuela al culminar sus estudios para impartir la asignatura de modelado, una actividad que compagina con trabajos en estudios profesionales. Sobre este aspecto, la profesional apunta: «Una vez que terminas, la inserción en el mercado es bastante sencilla porque en EVAD se trabaja con un modelo de aprendizaje muy práctico que emula los equipos reales e interdisciplinares de los estudios de videojuegos».

Además, Marina confiesa que ha encontrado en dar clases una profesión que realmente le apasiona y en la que quiere seguir desarrollándose.

Una industria en crecimiento

Como se ha demostrado en los últimos años, la industria de los videojuegos representa una fantástica oportunidad para los profesionales que quieran explorar nuevas vías o convertir su pasión en su profesión.

Según la Asociación España de Videojuegos (AEVI), este sector sigue liderando las industrias culturales y el desarrollo tecnológico en nuestro país, generando más de 9.000 puestos de trabajo directos de calidad. Gracias a esto, cuenta con un papel clave en la economía digital y cada vez más presencia en otros ámbitos.

Es por esto que la percepción de la ciudadanía al respecto ha cambiado y se concibe como una profesión con salida dentro y fuera de nuestras fronteras. Por ello no es de extrañar que los padres de Marina la apoyaran desde el principio. «Ellos entendieron la proyección de estos estudios y no se sorprendieron, aunque mucha gente cuando le digo en qué trabajo lo tacha de suerte, y nada más lejos, es cuestión de esfuerzo y de haber elegido EVAD como escuela», asegura.

En este sentido, la experta recuerda que actualmente esta formación ofrece capacitación para numerosas salidas profesionales. «No solo es ocio, son técnicas que se emplean en educación, medicina, arte, y todo lo que queda por explorar», afirma.

El hecho de ser mujer tampoco ha sido determinante. «Nunca ha sido nada destacable ni para bien ni para mal. En esta industria trabajamos con mucha igualdad, somos gente joven que tenemos eso bastante superado».