Rajoy acusa a Zapatero de 'liquidar' señas de identidad socialistas

Manifestó que "el pacto era muy claro y el acuerdo muy entendible: PP y PSOE le decían a ETA que, gobierne quien gobierne, en España la política antiterrorista no va a cambiar nunca" y que como "sólo pueden gobernar PP y PSOE, pierda usted toda esperanza, no tiene más salida que dejar de matar y no le vamos a pagar ningún precio político".

En este sentido, precisó que la sociedad española "no le debe nada a ETA" y recordó que dio su apoyo a Zapatero "para derrotar a ETA, para constatar su decisión de dejar de matar".

Rajoy comentó que comunicó al presidente que había que decir a la banda terrorista que "su única salida es disolverse, que no se va a pagar ningún precio político, que no se puede legalizar Batasuna mientras ETA no se disuelva porque si no, habrá dos 'etas': Batasuna haciendo política y otra, por detrás, ilegal, con las pistolas y garantizando que lo que hace Batasuna sea exitoso".

En este sentido, señaló que eso "es inmoral, ilegal, sobre todo un enorme error e ineficaz" y defendió la lucha contra el terrorismo "dentro de la ley, defendiendo a las víctimas, sin pago de precio político", ya que "el estado de Derecho tiene a la ley como único poder por encima del cual no hay ninguno y a la ley estamos sometidos todos, el Rey, Zapatero, ETA y todos".

Por otra parte, aseguró que con la Constitución de 1978 "los españoles conocíamos nuestra historia, todos nos pusimos de acuerdo en mirar hacia adelante, al futuro y en dejar atrás el pasado y todos cumplieron: Adolfo Suárez, Leopoldo Calvo Sotelo, Felipe González y tuvo que llegar este irresponsable a crear un lío que nadie le había pedido". Mariano Rajoy resaltó que el PP "sólo se ocupará del presente y del futuro" porque, según él, "para el pasado ya está Zapatero".

Sobre la inmigración, comentó que "hay graves problemas en las fronteras, todos los días mueren seres humanos que intentan llegar a Canarias y el Gobierno español sin hacer nada" y criticó que a la reunión de los ministros de la UE responsables de inmigración no fue ayer ningún ministro español.

Dijo que "después de que nos haya maltratado Marruecos, Mauritania y de que hasta en Malta nos toman de broma, en la reunión más importante del año sobre el asunto más importante, que es el de la inmigración, el Gobierno de España no está, abdica de sus responsabilidades y se dedica a seguir creando líos hasta ayer en el conflicto de Oriente Medio".

Rajoy lamentó que la política del Gobierno de España es la política de "la generación de líos, de no abordar los problemas reales, de hacer lo contrario de lo que dice la gente".