Málaga cantaora

La Málaga de tablaos, de cantes, de juergas en los montes, de berzas, de zambras gitanas, de corralones con duende, de romerías tempranas. La de ... las mil tabernas. Málaga de las 'cañaíllas', los 'búzanos', las 'coñas' e 'invasores'. La de Casa Flores en calle Ancha, la del Pombo y la Raya, la de la gran Taberna Gitana. La Málaga de zapato abotinado con alto tacón, chaqueta y pañuelo de raso. La Perchelera y Trinitaria. La Málaga que conoció y curtió al 'Tiriri'. Una Málaga que se apaga con una de las voces más señeras; de las de arte y gracia. El Tiriri representa la alegría de una ciudad durante mucho tiempo castigada, de fatigas y hambre, pero de sonrisa y chiste en la cara. 'El Tiriri': representante ejemplar del cante hondo de Málaga. La vida le hizo buscársela y con qué fuerza y garra. Me hubiese encantado acompañarle en una de sus noches en el Torremolinos de los años dorados; aquel de la colosal sala de fiestas 'El Mañana', con su impresionante jardín de arbustos, magnolias y rosales para acabar en el 'tablao el Jaleo', en la plaza de la Gamba Alegre, rodeado de los guiris más modernos sedientos de profunda cultura hispana. Málaga es una ciudad que a menudo procrastina con sus artistas, ejerciendo de auténtica y verdadera madrastra; aún así los que la amamos, como 'El Tiriri', sabemos siempre perdonarla. Como si en un palimpsesto escribiéramos su nombre, una y mil veces debemos recordar su artística hazaña, reivindicando el espíritu jovial y alegre de quien sabe que con humor, la vida mejor se traga. Intento evocar su paso por este mundo y sé que ya estará cantándole a las almas que por otros mundos viajan. 'Tiriri' de Málaga, eres 'cantaor' de raza. En el sótano del antiguo tablao, aún intacto, de Emi Bonilla en el viejo Camino Nuevo, tu voz aún nos llama. Embajador de Málaga, cuéntale al universo cómo sabemos los malagueños vivir sin dramas, con dulce vinillo, cante y ganas de jarana. La Málaga que Federico bautizó llora por la muerte de uno de sus más selectos hijos. Por ti maestro. Eres grande.