El Congreso y el Gobierno se encaminan a un grave conflicto institucional

El Congreso pidió hoy oficialmente al Gobierno, a través de una carta de su presidente, Patxi López, que reconsidere su negativa a que Rajoy y sus ministros se sometan al control de la cámara. La carta, que va dirigida a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, va a ser contestada de forma negativa en las próximas horas, según adelantó el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón.

Ayllón avanzó que el Gabinete mantiene su criterio, basado en informes jurídicos, de que el actual Gobierno fue elegido por el Congreso anterior y que no tiene la confianza del presente. Por ese motivo, creen, está incapacitado por ley para adoptar decisiones políticas mientras está en funciones solo puede hacer trabajo de gestión administrativa- y por ello tampoco puede ser controlado por el actual Parlamento.

Patxi López, por su parte, explicó que la mayoría del Congreso, todos los grupos salvo el PP, piensan exactamente lo contrario y que van a actuar en consecuencia. De hecho, los grupos tienen previsto mantener las comparecencias aprobadas de miembros del Ejecutivo, como la cita en comisión este jueves del ministro de Defensa, aprobar otras nuevas y convocar, justo después de Semana Santa, un pleno ordinario de la cámara con sesión de control, que incluirá preguntas e interpelaciones a Rajoy y a sus ministros.

El PSOE ya adelantó en la reunión de hoy de la Junta de Portavoces que si el Gobierno ignora las citaciones de comparecencia del Congreso y rechaza someterse a la sesión de control pedirán al pleno de la cámara que apruebe la interposición de un conflicto de atribuciones ante el Tribunal Constitucional, para que la corte obligue al Gobierno a someterse al control del Parlamento. La propuesta socialista tiene todas las opciones de salir adelante porque estaría apoyada por todos los partidos a excepción del PP.