Muere Olivia Valère, figura clave de la noche marbellí

La empresaria francesa ha muerto en París a los 75 años

David Lerma/ Joaquina Dueñas

Jueves, 9 de junio 2022, 17:00

La empresaria Olivia Valère, la reina de la noche marbellí, falleció este jueves a los 75 años en Francia a causa de un cáncer que ... sufría desde hace varios meses. Valère ha muerto en su casa de París, ciudad a la que se trasladó después de que su enfermedad se agravara.

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Según fuentes cercanas a la familia, llevaba un año luchando contra la enfermedad, «como una jabata, trabajando hasta el pasado mes de marzo». Tal como era su deseo, será enterrada en su tierra de adopción, «su Andalucía, su Marbella». En unos días se hará un funeral en la ciudad de la Costa del Sol que fue su casa y en la que se convirtió en un referente del ocio nocturno.

La empresaria francesa llegó a Marbella a en la década de los 80 después de haber triunfado con una discoteca en París. No lo hizo sola sino de la mano de Nakachian y Kimera a los que había conocido en Francia. En Marbella comenzó su nueva andadura profesional con un establecimiento en el hotel Puente Romano por donde pasaba lo más granado de la sociedad de la época. También fue la artífice del local en Gray D'Albión en Puerto Banús. Funcionaba tan bien que hasta ella misma se sorprendía al recordarlo para este periódico: «Puerto Banús se colapsó de coches para la inauguración». Así fue como conoció a muchas de las personalidades más reconocidas de la jet-set marbellí, como Jaime de Mora y Aragón, al que calificaba como «uno de los mayores caballeros que he encontrado».

Años después en julio del 2000 haría realidad su gran sueño, la apertura de la discoteca que llevaba su nombre entre Puerto Banús y Marbella. Un establecimiento no exento de polémica por cuestiones urbanísticas relacionadas con el Grupo Independiente Liberal (GIL), que gobernaba entonces. Al margen de esto, Olivia Valère convirtió su discoteca y su nombre en una marca, sinónimo de fiesta, lujo y diversión.

Construida en apenas 72 días, la discoteca Olivia Valère es un templo de la noche. Por allí han pasado desde Alberto de Mónaco hasta Bruce Willis, Camilo José Cela, Eva Longoria o Antonio Banderas que incluso celebró allí su 59 cumpleaños junto a Nicole Kimpel.

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En la inauguración del establecimiento, estuvo Naomi Campbell, amiga de la empresaria. Olivia recordaba que aquel verano, la modelo «estaba triste por su ruptura con el bailarín Joaquín Cortés» y aprovechaba su paso por la discoteca para evadirse de aquellos malos momentos.

Otra anécdota que le gustaba referir era cuando Prince, que residía en Marbella a finales de los 90 decidió meterse en la cabina del dj y ponerse a pinchar. «Los clientes se quejaron y tuvimos que sacarlo», reconocía. Mejor suerte tuvo Paris Hilton, a la que contrató varias veces como dj y que conseguía congregar a numeroso público.

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En la primera foto, con Naomi Campbell, en una fiesta en Marbella. En la segunda, con Jesús Gil en la inauguración de la discoteca marbellí y por último, con la princesa Magdalena de Suecia JOSELE/SUR

Trabajadora incansable, no le podía la falsa modestia: «Venir Marbella y no pasar por Olivia Valère es como ir a Roma y no visitar el Vaticano».

Esa era la Olivia de las fiestas, del brillo y de los famosos. La de puertas para dentro era una mujer afable y familiar, amante de la cocina, que tenía una excelente relación con su primer marido, Albert, con quien tuvo dos hijos, Karen y Arnaud, y que adoraba a su segundo marido Phillippe, con quien tuvo a Xavier. Tan bien se llevaban que convivía con sus dos maridos en la villa que poseía en Guadalmina.

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Le encantaba disfrutar de sus nietos y cuando miraba atrás, reconocía que le habría gustado pasar más tiempo con sus hijos cuando ellos eran pequeños. Unos hijos que en los últimos años se habían puesto al frente de los negocios siguiendo su ejemplo aunque ella nunca llegó a retirarse del todo.

Nuevos famosos

Olivia seguía disfrutando de la noche pero entendía que ya no era lo mismo. En los últimos años había visto cómo había cambiado el mundo de los famosos. «Antes pagaban por venir a mi discoteca y ahora hay que pagarles», decía. Ella, que había visto en su casa a estrellas del celuloide como Sean Connery o de la canción como Julio Iglesias y su hijo Enrique, observaba escéptica el cambio: «Era todo más glamuroso», valoraba.

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Y es que, para ella, las redes sociales había hecho perder la naturalidad y la libertad individual. A esto se sumó la pandemia que vino a coartar aun más la libertad: «La gente se divertía de forma más libre. Ahora hay muchas reglas», reflexionaba para este periódico con temor a que sus nietos no pudieran ser tan libres como lo había sido ella.

Con el fallecimiento de Olivia Valère se ha marchado una empresaria pero también una mujer que era feliz viendo a los demás disfrutar. «Mucha gente que visita mi club quiere hacerse fotos conmigo y yo estoy encantada porque ellos son felices, pero yo más».

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