Marbella aprueba inicialmente el presupuesto de 2020 marcado por el cumplimiento del techo de gasto

El presupuesto de Marbella para 2020 asciende a 295 millones de euros, un 4,33% más que en 2019. De estas cuentas hay dos aspectos a destacar. Por un lado, el volumen inversor recogido, que alcanza un máximo histórico: 41 millones de euros, un 9% más con respecto al último presupuesto. Por otro lado, las cuentas cumplen, según informe de la Intervención municipal, con el objetivo de estabilidad presupuestaria y el límite del techo de gasto para 2020. El portavoz y concejal de Hacienda, Félix Romero, detalló que la premisa del departamento a la hora de elaborar el presupuesto ha sido el respeto a los objetivos contenidos en el Plan Económico y Financiero aprobado para el periodo 2019/2020. «Un plan –afirmó– que nos obliga a no romper el techo de gasto, pero que no impide que esta Corporación presente unos presupuestos inversores y que siga con su hoja de ruta en cuanto al cumplimiento de sus obligaciones para con los ciudadanos y los trabajadores municipales».

El responsable del área de Hacienda defendió asimismo la apuesta inversora frente a un escenario de «recesión» para la «modernización de Marbella y San Pedro» y citó, entre otras partidas, los 3,5 millones para el Plan de Barrios, los 2 millones consignados para un plan de vivienda pública, así como los 1,5 millones para la adquisición de autobuses destinados al transporte escolar. El portavoz afirmó que este presupuesto está diseñado para «atravesar con éxito las turbulencias que se adivinan como consecuencia de la crisis que ya se cierne sobre nosotros», porque «renuncian a cualquier espejismo e incluyen solo aquellos compromisos que estamos en disposición de cumplir».

La oposición al unísono se mostró en completo desacuerdo con esta afirmación, sobre todo en lo que se refiere al capítulo de inversiones por vincular una parte de las mismas a operaciones de enajenación patrimonial y a los 15 millones de fondos europeos (Edusi) aprobados, aunque en plena tramitación, y que el Consistorio podrá invertir hasta 2023.

En virtud de estos elementos, el socialista José Ignacio Macías advirtió de que las inversiones del PP son como el «cuento de la lechera» al estar condicionadas a futuribles. «Me temo, señor Romero, que el montante real para inversiones ejecutables no pasará de 10 millones de euros». En cualquier caso el edil echó en falta «planes de inversión que realmente cambien la vida de los marbelleros y sampedreños con un plan de vivienda serio o un plan de aparcamiento que no se limite a asfaltar y pintar rayas blancas en una zona donde ya se aparcaba».

Macías, que habló de presupuestos «inflados» y elaborados «de prisa y corriendo para presumir de ser el primer Ayuntamiento andaluz en aprobar sus cuentas», también hizo mención a la subida de la presión fiscal en 1,3 millones de euros «con cargo a la subida del IBI».

Al respecto, la alcaldesa afirmó que presentar «en tiempo y forma como marca la ley» unos presupuestos de más de 295 millones, con récord en capacidad inversora y donde «se ha hecho un gran esfuerzo para contener la carga fiscal», es para sentirse «orgulloso».

Desde el PSOE se puso de relieve el «escaso» tiempo que ha tenido la oposición para examinar el documento, no obstante, advierten de que el presupuesto no dedica ni un euro a la transformación de los barrios más modestos de Marbella entre los que se citó a Santa Marta, Las Albarizas y Divina Pastora.

Con estos razonamientos sobre la mesa el voto del Partido Socialista fue negativo, al igual que el emitido por OSP, que argumentó su rechazo en dos cuestiones fundamentales: el retroceso «real» que ha sufrido el presupuesto contemplado para San Pedro –conseguido durante su etapa en el Gobierno–, que asciende para 2020 a 21 millones, y el desmantelamiento de la estructura orgánica de la Tenencia de Alcaldía que constatan las propias cuentas.

Manuel Osorio subrayó que las áreas de gestión creadas en la Tenencia durante la pasada legislatura no tienen reflejo presupuestario en las nuevas cuentas elaboradas por el PP, por lo que a su juicio, «se tiene la intención de convertir la Tenencia de Alcaldía de nuevo en una oficina de registro de Marbella». Por otra parte, el concejal puso de relieve que el presupuesto de San Pedro no crece este año sino todo lo contrario. «Si nos vamos a los números gruesos resulta que le han cizañado a San Pedro 4 millones de euros», dijo. Argumentó que más de la mitad de las inversiones contempladas –6,5 millones– están condicionadas tanto a la venta de patrimonio como a la ejecución de los fondos Edusi. El concejal, que fue responsable económico en el gobierno del PP, expuso la imposibilidad de vender el vasto patrimonio del Ayuntamiento construido en edificios fuera de ordenación y la lentitud en la tramitación que están sufriendo los citados fondos europeos «y que no se van a ejecutar en 2020».

«Señor Osorio, no debe temer absolutamente nada», le espetó la regidora, quien destacó, a tenor de la venta de patrimonio municipal de suelo, que existen dos desarrollos urbanísticos aprobados ya en Junta de Gobierno por valor de 11 millones.

En su intervención, la concejala de Cs, María García, no pasó por alto la vinculación de inversiones a la venta de patrimonio municipal de suelo por un importe de 11,4 millones de euros para el año que viene, por lo que calificó los presupuestos de «ilusorios», e hizo referencia a la «escasa» ejecución presupuestaria de la trayectoria del PP, por debajo del 35%.

La alcaldesa invitó a la concejala a que se paseara por los barrios para ver el fruto de las inversiones realizadas y echó en falta que la oposición no valorara el informe de la Intervención donde se constata que el presupuesto para 2020 cumple con la estabilidad presupuestaria, la regla de gasto y el Plan Económico y Financiero. «Esto es lo más importante que contienen estas cuentas serias y rigurosas», defendió la regidora en el turno de réplica.