La Audiencia de Málaga dicta orden de busca y captura contra uno de los empresarios condenados por 'Malaya'

La Sección Primera de la Audiencia de Málaga ya ha iniciado los trámites para ordenar la busca y captura de Andrés Lietor. Nada se sabe desde hace tiempo de este empresario, sobre el que ya pesan dos órdenes de busca y captura dictadas por sendos juzgados madrileños el año pasado.

Fuentes judiciales explicaron que el empresario Carlos Sánchez, condenado también a cuatro años y medio de cárcel, no ha ingresado en prisión porque se encuentra en la República Dominicana, donde tenía que asistir a dos procesos judiciales. Las fuentes señalaron que Sánchez ha aportado al tribunal justificante de estas citaciones judiciales en el país caribeño donde tiene negocios desde hace tiempo. El tribunal podría concederle un nuevo plazo de siete a diez días para su ingreso en prisión.

Otro que está a la espera de purgar la condena es el empresario, Massimo Filippa, al que el tribunal tiene localizado en Italia y que, según aseguraron las fuentes, piensa cumplir condena en un penal de este país, por lo que ya se han iniciado los trámites correspondientes para proceder a su ingreso en una prisión italiana para que pague la pena de tres años y medio que le impuso la sentencia de Malaya.

Por su parte, el testaferro Celso Dema (dos años y medio de cárcel) y el exedil de Marbella Rafael Calleja (tres años y medio) tampoco han ingresado en prisión al encontrase enfermos, según han comunicado a través de sus respectivos abogados. El tribunal ha pedido los informes médicos de cada uno y los someterá a valoración de los forenses judiciales antes de tomar una decisión sobre su situación personal.

Sobre los condenados con penas iguales e inferiores a dos años de cárcel, el tribunal tiene previsto su citación a lo largo de la semana que viene para que concreten el pago de las multas y responsabilidades civiles a las que fueron condenados y, en su caso, los calendarios para abonarlas. Las fuentes manifestaron que la intención del tribunal es conceder un plazo máximo de año y medio si se acuerda fraccionar los pagos.