The New Raemon y Ángel Stanich, al Ojeando Festival 2015

The New Raemon (Ramón Rodríguez), "el poeta del escepticismo", como define Israel Olivera, presentará en el Ojeando su 'Oh, rompehielos', décimo álbum bajo el nombre de la formación que publicará el próximo 27 de enero. Un cantautor ("por llamarlo de alguna manera", apunta Olivera) "magnífico" y que desde hace varios años ha estado en las quinielas del festival a la hora de configurar su line-up. El 2015 ha sido definitivamente el año de su puesta en escena en Ojén "por motivos de agenda". Aunque hace unos meses anunció su retirada, el músico catalán parece no querer quedarse quieto, pues a su nuevo disco hay que sumar su labor como productor de Manos de Topo, el retorno de Madee (grupo embrión de The New Raemon) a los escenarios, su reciente LP (titulado 'Convergència i Unió') con María Rodés y Martí Salés y, por qué no recordarlo, el éxito de sus dos hijas adolescentes, que han debutado este año con su grupo Mourn y que ya resuenan en las ondas de la escena alternativa nacional. El último concierto de The New Raemon en Málaga (esta vez en solitario) fue en Velvet a finales del septiembre pasado, cuando consiguió llenar la sala de calle Comedias.

Angel Stanich es "otra de las apuestas de Ojeando Festival" que "encaja perfectamente con la filosofía de la cita". Músico "rompedor" y "prometedor", el cántabro debutó en mayo del año pasado con su 'Camino ácido' y su última incursión en Málaga fue hace menos de un mes en la sala Velvet, donde también pudo colgar el cartel de 'sold out'. Javier Vielba (El Meister), frontman de Arizona Baby, apostó por él al producir su único álbum hasta la fecha, y eso ya representa toda una garantía. "Es un músico del que se habla y que poca gente conoce", comenta Olivera, que recuerda que el Ojeando "también ha servido para dar a conocer al público esos nombres que están en la escena y que requieren de un impulso definitivo". Esquivo con la prensa y enigmático en sus estribillos, sus canciones tienen un punto canalla (gracias, en gran parte, a su característica voz y a lo humorístico, a veces, de sus letras) que transportan a un sonido fronterizo que deja ver influencias de Neil Young o Jim Morrison, además de Bukowski en lo literario. El responsable de comunicación del Ojeando lo ha calificado como "una de las apuestas firmes de este año en la música independiente nacional" que va a estar "en el ochenta por ciento de los festivales". Ojeando no iba a ser menos.

Defiende la organización del festival que el leitmotiv de esta edición es reivindicar una vez más a Ojén como pueblo indie dada su apuesta por la música independiente nacional, esto es, presentar "el contraste entre la música que se trae y el lugar donde se hace". De ahí a que hayan querido regresar a la esencia del encuentro, que ya cumple su novena edición. "Quizás sea menos comercial", admite Olivera, "pero también es más puro", añade. Tras el Ojeando bailable de Fangoria y Supersubmarina ahora el festival quiere apostar por "esos grupos que no son tan conocidos pero que son relevantes dentro del panorama nacional". En esa misma escena se sitúa el grupo malagueño Airbag, que presentará en Ojén su próximo álbum (aún sin título conocido), El Columpio Asesino (que repite en el festival churruco), Xoel López (que, en su mejor momento, estrena disco esta primavera), Belako (premiados con el galardón Rolling Stone a la banda revelación 2014) y We Are Not Djs, que pisan por primera vez el Escenario Patio tras otras actuaciones en el festival.

Parece ser que el Ojeando no coincidirá este año con ningún otro gran evento musical, puesto que el Weekend Beach Festival se ha movido en el calendario. Tras coincidir el verano pasado ambas citas en un mismo fin de semana, este año el macrofestival de Torre del Mar se celebrará los días 8, 9, 10 y 11 de julio. Por su parte, el Ojeando mantiene los precios: 20 euros (más gastos) el abono y 30 euros (más gastos) con zona de acampada incluida. Estefanía Merino confirma, además, que el presupuesto del festival será similar al de la pasada edición (rondará los 90.000 euros) y que sigue suponiendo para el municipio una actividad "preferente" porque "todos los comercios notan que en esos días hay un boom, un respiro para pasar el invierno".

Presencia malagueña

Olivera ha destacado, como adelanto, la gran presencia malagueña que va a tener este año el festival, pues habrá al menos dos bandas locales en el escenario principal, los dos djs serán malagueños y habrá un accésit a la mejor banda malagueña dentro del concurso Ojeando Nuevos Talentos (cuyo fallo se conocerá a finales de febrero). Además, añade que la gran mayoría de bandas del Escenario Plaza serán, asimismo, malagueñas.

La organización dio como pista la palabra "barbas" para el avance que se ha desvelado hoy. Tiene sentido. ¿La próxima? Olivera adelanta a este periódico que es "como en casa". El 5 de febrero se resolverán las dudas, pero hasta ese día muchos devotos del festival estarán intentando resolver el enigma.