El Pórtico, cocina leonesa

El restaurante se encuentra ubicado, como dice el propio Emilio, a espaldas del centro de la localidad, en un pasaje muy cercano a la popular Calle San Miguel y a los diversos parkings que hay en los alrededores. Está decorado con un estilo castellano rústico muy de moda en la década de los setenta y ochenta. Acogedor y cálido es la impresión que el cliente se lleva nada más sentarse en alguna de sus mesas del comedor, pues El Pórtico dispone de una zona separada para el tapeo. En este pequeño salón 'De Tapeo' igualmente se puede comer o cenar, aunque de una forma más informal, a base de tapas, raciones o medias raciones. Quizá sea uno de los establecimientos de Torremolinos donde más variedad de tapeo se pueda encontrar, más de 60 tapas, que van desde una milhoja de cecina y pimientos de El Bierzo hasta unos huevos a la leonesa, pasando por varios tipos de tostas o empanadas.

La cocina leonesa es contundente y muy apropiada para estos días otoñales e invernales. En la carta de El Pórtico nunca faltan el botillo berciano o el cocido maragato. Ambos cocidos son leoneses, pero muy diferentes en forma y maneras de comerlo. Mientras que el botillo que Isabel prepara a diario está muy conseguido, pues el ahumado y el pimentón del característico botillo no enmascaran el sabor del repollo y las patatas, por su parte el cocido maragato es el único guiso que se come al revés. Primero las distintas carnes de cerdo y vacuno que lo conforman, luego los garbanzos y las verduras y se acaba con la sopa, pues si uno se encuentra lleno, algo que suele ocurrir con el que preparan en esta casa, mejor que sobre la sopa que no el resto de los ingredientes.

El Pórtico es uno de esos restaurantes de cocina tradicional pensados para una clientela que gusta de sabores populares, raciones abundantes y precios normales, incluso en sus vinos, la mayoría de corte muy tradicional y de origen El Bierzo.

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Es uno de los platos estrella de la cocina de León. Su principal característica es el ahumado de las carnes y la utilización del pimentón. Muy correcto en cuanto a la textura de las patatas y el sabor del chorizo leonés.

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A la cecina le pasa como al jamón, hay muchas y de varias clases. En El Pórtico la que se ofrece, solamente cortada en lonchas, tiene su propia D. O., lo que ya es una garantía. Lo mejor es tomarla con un poco de aceite.

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No es fácil encontrar esta morcilla en la restauración malagueña, pero en esta casa la tienen y preparan a la usanza tradicional, previamente hecha a la plancha y luego se unta en pan tostado. Dulce y sabrosa en boca.