Oleuturismo en la ‘fuente’ del Guadalhorce
La almazara Cien Caños, en Villanueva del Trabuco, invita a una inmersión lúdica en la cultura del aceite de oliva
Esperanza Peláez
Martes, 19 de enero 2016, 23:37
La provincia de Málaga tiene un rico y variado patrimonio de olivos monumentales, molinos y maquinaria antigua que algunas almazaras están sabiendo aprovechar para invitar ... a los viajeros a disfrutar de la doble riqueza de aceites de oliva virgen extra de gran calidad (y variedad) y de parajes magníficos y a veces no tan conocidos.
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La Fuente de los Cien Caños es la confluencia de varios arroyos en el término municipal de Villanueva del Trabuco donde se sitúa el nacimiento del río Guadalhorce, y es también el nombre del aceite y de la almazara 100 Caños, que, junto con un aceite de oliva virgen extra premium procedente de aceitunas hojiblancas recogidas en envero y procesadas en frío, ofrece también un atractivo programa de visitas pensado para que la familia completa pueda disfrutar de una aproximación a la cultura del olivar en la comarca Norte de Málaga.
Una finca centenaria
La finca, fundada a principios del siglo XX, está enclavada en un paraje hermosísimo a los pies de la Sierra de San Jorge. Farallones de roca caliza emergen entre verdes colinas suaves donde el olivar convive con almendros y rebaños de ovejas y cabras. El Molino Jabonero, que alberga la almazara y tiene en su recinto un acueducto antiguo y un molino harinero, se ha acondicionado también para acoger salas de cata, una minialmazara para demostraciones y talleres y un mesón donde los visitantes pueden disfrutar de platos basados en la gastronomía de la zona con el aceite de oliva como protagonista.
En la almazara se programan distintas modalidades de visita, pensadas para dar a conocer de forma divertida todo el proceso de elaboración del aceite de oliva a través de un paseo por el olivar observando las tareas del campo en cada estación, un recorrido por las instalaciones que permiten distinguir cómo ha evolucionado el proceso de elaboración del aceite de oliva, porque en la finca se conserva la maquinaria antigua (piedras de moler, prensa de capachos...) que contrasta con la asepsia y la eficacia de la moderna. Incluso disponen de una minialmazara artesanal donde los visitantes pueden probar a extraer su propio aceite.
Por supuesto, las visitas arrancan con un desayuno de molletes con aceite de oliva virgen extra (entre los aceites que se elaboran en la almazara, merece la pena probar el 100 Caños Edición Limitada Primer Día de Cosecha, del que se han puesto a la venta solo 1.600 botellas), y el programa de la visita a las instalaciones y la degustación del aceite se puede completar con una ruta senderista para conocer la Fuente de los Cien Caños y el entorno natural donde nace el Guadalhorce, con una experiencia de molienda en la almazara didáctica, con una cata dirigida que permite aprender a reconocer diferentes tipos de aceites de oliva y con un menú degustación con platos de la zona como las migas, porrillas de setas o de chivo, carne en salsa, sopas y diversos platos elaborados con el aceite de oliva y apegados al recetario local. Los precios oscilan entre los 8 y los 20 euros para los distintos tipos de visitas, y la cata acompañada de un surtido de aperitivos cuesta 15 euros. Lo mejor es que ellos se adaptan a las peticiones de los grupos.
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