'Juanito', el bocadillo que creó un cliente y es uno de los favoritos para desayunar en un restaurante de Casabermeja

De aquello hace ya más de diez años, según relata Pepi Flores, cocinera de La Huerta. Este cliente, Juan, «lo pedía así y así se quedó, porque muchos otros empezaron a pedirlo», añade la copropietaria de este establecimiento, reconocido en varias ocasiones por su apuesta por la cocina tradicional y en especial por su apuesta por el chivo lechal malagueño.

Poco a poco, pasó a llamarse 'Juanito', es decir, el bocadillo que en La Huerta lleva lomo en manteca de elaboración propia y una tortilla de dos huevos como ingredientes principales. A ello hay que añadir el tomate refregado en la parte de abajo y una ligera capa de mayonesa en la de arriba. Entre todos estos ingredientes, el primero es el más valorado. Cada semana se hace hasta en dos ocasiones el lomo en manteca a la manera tradicional, pero con el sello personal que le da la cocinera.

También es importante la calidad del pan. Como otros bocadillos, puede pedirse en distintos tamaños, como pitufos, vienas o molletes. Todos ellos se elaboran en el obrador de referencia de Casabermeja, Nuestra Señora del Socorro, situado a tan sólo unos metros de la iglesia del pueblo.

Todo esto hace que hoy sea uno de los desayunos favoritos de los habituales de La Huerta. «Quien lo pide, repite», sentencia Pepi Flores. Hay quienes escuchan el pedido de otros clientes y preguntan o directamente piden lo mismo.

Pedir un 'Juanito' en La Huerta, con el café incluido, cuesta desde los 3,5 euros en el tamaño más pequeño, el pitufo, hasta los 4,5 euros del mollete o la viena. Una excelente relación calidad precio por sus ingredientes y por lo que sacia.

Pero, más que por la variedad y calidad de sus desayunos, La Huerta es conocido especialmente por su carta, con una larga trayectoria en la apuesta por el recetario tradicional de Casabermeja y del resto de la provincia. No en vano, es uno de los socios protectores de La Carta Malacitana y ha sido premiado recientemente por la Academia Gastronómica de Málaga. A ello hay que sumar otras distinciones, como ganador del Concurso de la Tapa de la Cabra Malagueña, que se celebra cada mes de septiembre.