La Real Sociedad B, ante una empresa harto complicada
El rival del Málaga este domingo regresa a Segunda División con un solo fichaje y mucha inexperiencia, con una apuesta firme por su bloque cara a mantenerse en la categoría, algo siempre difícil para los filiales
Tras el descenso del Villarreal B en la Liga 2023-24, la división de plata del fútbol español se había quedado sin filiales, pero esta ... campaña la categoría ha vuelto a recuperar uno, la Real Sociedad B, que curiosamente llega a Segunda derrotando en la final de los 'play-off' de ascenso al Gimnástic de Tarragona, aunque disputando la vuelta de local, con el arbitraje de un malagueño, Abraham Domínguez Cervantes.
Publicidad
El popular 'Sanse', o los 'potrillos', como se les conoce, ya estuvieron en Segunda División en la etapa del malaguista Gabilondo en el filial, en la temporada 2021-22, con el ahora técnico del Real Madrid, Xabi Alonso, en el banquillo, pero no se pudo evitar el descenso (posición vigésima). Históricamente, se trata de la cuarta temporada en esta categoría, tras el ciclo entre la campaña 1960-61 y 1961-62, y lo vivido en la 2021-22.
Una de las curiosidades de este equipo es que culminó el ascenso con un entrenador diferente al que dirigió la plantilla casi todo el curso, Sergio Francisco. Al anunciar la Real Sociedad que este dirigiría al primer conjunto en la 2025-26, se decidió que fuese su segundo Iosu Rivas, el que le relevara al frente en ese tramo decisivo. Sin embargo, ahora el entrenador del filial es el excentral Jon Ansotegi, que ejercía de tercero del primer equipo, y que tiene como ayudante a Imanol Agirretxe, otro 'viejo conocido'. Ansotegi llegó a jugar nada menos que 227 partidos a lo largo de las once temporadas en las que perteneció al primer equipo y llevaba siete años en el cuerpo técnico de la primera plantilla junto a diferentes preparadores.
Frente a lo que suele ser habitual en el caso de filiales cuando llegan a Segunda División, fichar algún jugador con cierta experiencia ante lo complicado de lograr la permanencia para un equipo tan joven, el club sólo ha cerrado una incorporación, la del central japonés Kazunari Kita, de 19 años (en edad juvenil) y cedido desde el Kyoto Sanga, con una opción de compra. Nada menos que 1,89 metros, aunque no fue titular en la primera jornada liguera.
Publicidad
De hecho, la Real B ganó su primer partido del curso (1-0 al Zaragoza) con todo el grupo del ascenso, más algún juvenil subido a esta plantilla y el regreso del extremo derecho Dadie, que estuvo cedido en el Mirandés, donde participó poco. Pese a que podría parecer que es una apuesta muy complicada la que asume el club si pretende que el equipo se mantenga en Segunda, es cierto que la edad de un grupo amplio de jugadores se mueve entre los 22 y 23 años, más elevada de lo habitual en un segundo equipo.
Pero como todo filial, el objetivo es llevar futbolistas al primer conjunto, y para Ansotegi la mala noticia es que el interior Mikel Goti (máximo realizador la pasada campaña, con trece dianas), el medio centro Jon Gorrotxategi y el delantero Jon Karrikaburu están inscritos con el cuadro de Primera División, mientras que el medio centro Pablo Marín y el central Jon Martín van a continuar con dorsal del filial, aunque a efectos prácticos tampoco contarán.
Publicidad
Además, Balda y Marchal, que fueron baja en la primera jornada, se han recuperado, y Rupérez (un lateral que se perfila como uno de los próximos en afianzarse en Primera) no viaja. Ninguna de las ausencias fue óbice para que los 'potrillos', ante 6.318 aficionados que ocuparon las gradas inferiores de Anoeta, sorprendieran a un fallón Zaragoza. Bastó un contragolpe, con un pase de Gorosabel al keniata Ochieng, que partía desde campo propio, para el gol, con el delantero batiendo con sangre fría al portero rival sobre su salida.
El 4-3-3 de Ansotegi se transforma en un 4-4-2 en defensa, porque Ochieng se incrusta en una de las dos bandas con los volantes. Destacó el orden defensivo, la capacidad para efectuar transiciones rápidas y el buen hacer del medio centro Tomy Carbonell, clave en el inicio de las jugadas. En punta, Mariezkurrena es el más fogueado en Primera, tras su debut la pasada campaña (12 partidos, 300 minutos entre Liga y Copa y dos goles).
Publicidad
El once, si no se incorpora alguno de los lesionados, parece muy definido, con Fraga (portero internacional sub-21); Dadie (un extremo reubicado de lateral, que podría ser relegado por Rupérez), Beitia, Peru Rodríguez, Agote (o Balda); Carbonell, Mikel Rodríguez, Gorosabel (el volante más ofensivo del trío); Ocheng, Mariezkurrena y Orobengoa.
Pese al debut en Anoeta, el equipo jugará de local en el campo denominado Z7 de Zubieta, donde también disputarán sus partidos el equipo femenino. La nueva grada de este estadio se ha ampliado a unos 4.000 espectadores, con dos anfiteatros. La Real Sociedad B se mantiene invicta desde el verano, pues al 1-0 al Zaragoza se le suman las victorias ante el Osasuna B (4-1) y el Unionistas (0-3) y los empates ante un equipo 'b' del Rennes (0-0) y el Mirandés (1-1), también poco armado.
Publicidad
Uno de los motivos de orgullo en la cantera de la Real Sociedad es que los jugadores, lleguen o no al profesionalismo, salen de Zubieta con una formación académica y personal
Como quiera que perdió este verano a Guibelalde y Eder García (se fueron al Athletic B), habrá que estar atentos también a las irrupciones de futbolistas del segundo filial, como Astigarraga y Díaz de Alda (centrales), Fernandorena (lateral izquierdo), Garro (lateral derecho), Oleaga (medio centro), Eceizabarrena (interior), Agirre (interior), Astiazaran (media punta), Carrera y Jakes Gorosabel (delanteros).
Uno de los motivos de orgullo en la cantera de la Real Sociedad, muy representada en las alineaciones del primer equipo, es que los jugadores, lleguen o no a él en el futuro, salen de Zubieta con una formación académica y personal. El club cuenta con un departamento de educación, formado por seis personas, con un seguimiento a la evolución escolar. Hay unas aulas de estudio, y los profesores recogen a los futbolistas en Zubieta y los llevan andando a la ikastola Landaberri, situada al lado de los campos de entrenamiento. De los canteranos en edad universitaria el 93 % esté cursando alguna licenciatura o grado. Además destaca la estabilidad y la permanencia de los jugadores, porque un 70 % de los que entra a la cantera siguen en el club al cumplir los 17 años.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión