SUR

La marcha de Adriana certifica el fin de un ciclo para el Málaga femenino

«Me hubiera gustado colgar las botas aquí pero la situación no me ha dejado otra alternativa», se sincera la delantera turolense

marina rivas

Miércoles, 1 de julio 2020, 14:28

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Todo comenzó con el descenso y continuó con la agravación de la crisis económica del club. Más allá del proceso de formación, el destino de ... un deportista siempre estará donde pueda vivir de ello. Una realidad que en lo que llevamos de mercado estival ya ha supuesto la marcha de la centrocampista Pamela, la central malagueña Postigo (ambas al Granada) y ahora de la primera capitana del Málaga femenino, Adriana. La delantera turolense llegó la temporada previa al ascenso a Primera para impulsar al conjunto con su dilatada experiencia en la élite nacional, la selección y el extranjero. No tardó en convertirse en un pilar del equipo dentro y fuera del campo. Dentro, como la máxima goleadora del conjunto los tres años; fuera, con su compromiso con el club, formando parte activa de la Fundación blanquiazul y también del cuerpo técnico del Málaga Genuine.

Sin embargo, al encontrarse en el tramo final de su carrera, y dada la reducción salarial que le planteaba el club por los recortes, Adriana ha tenido que declinar la oferta del club para aprovechar los que posiblemente sean sus últimos años en otro destino (todavía no anunciado). Se marcha dejando una carta sentida carta de despedida. «Hoy es un día muy triste para mí. Con lágrimas en los ojos me despido de la que ha sido mi casa estos últimos tres años. Desde el primer día supe que el Málaga era un club especial y el malaguismo se grabó a fuego en mi corazón. A cientos de kilómetros de casa, sentí que tenía un hogar, encontré en vosotros una nueva familia», comienza.

Una malaguista más

Adriana agradece a todos aquellos con los que ha trabajado este tiempo y que le dieron la oportunidad de defender este escudo «por el que me he entregado cada día al máximo tanto dentro como fuera del campo y con la felicidad absoluta de llevar el brazalete de capitana y lo que eso representa, intentando hacerlo lo mejor que he sabido». La turolense dedica también unas palabras a la afición por su apoyo incondicional y concluye su comunicado haciendo alusión al lema malaguista (‘Memoria, compromiso y fe’): «Me hubiese encantado colgar las botas aquí, pero la situación no me ha dejado otra alternativa. No puedo decirte ‘Adiós, Málaga’ porque el sentimiento nunca muere y donde esté, siempre será una malaguista más». El brazalete pasará ahora a manos de dos sellos de la casa que al menos seguirán una temporada más: la central Ruth y la lateral Encarni. Queda por ver cuál será el futuro de la internacional María Ruiz.

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