¿Por qué algunos vecinos se refieren a sus pueblos como El Lugar?

Para entender el origen de esta expresión hay que remontarse a las repoblaciones cristianas que se dieron sobre todo en el siglo XVI, tras el fin del reino nazarí de Granada. Comenzó en esa época el reparto de tierras y también el señalamiento de sus respectivos límites. Así, se acotaba «el lugar» y se le dotaba de una ordenación jurídica que se fundamentaba en una Carta Puebla o de Población, es decir, el documento donde se relacionaban los derechos, privilegios y extensiones de los nuevos habitantes.

Por tanto, esta expresión, que fue muy usada hace casi medio milenio, ha conseguido perpetuarse en algunos pueblos andaluces. De ellos, los que más han mantenido esa costumbre han sido precisamente Alhaurín El Grande, El Borge, Casabermeja y Alfarnate, cuatro localidades del interior donde es muy frecuente no sólo escuchar estas referencias sino también encontrar distintos establecimientos o incluso colectivos denominados como 'El Lugar' o 'El Lugá'.

Así, por ejemplo, en El Borge, hay desde una carnicería con esa denominación hasta un libro del escritor y ex presidente de la Diputación Salvador Pendón, titulado 'La casa del Lugá'. Por su parte, en el pueblo vecino de Almáchar, donde es mucha más frecuente su uso, hay desde una compañía de teatro a una tienda de productos artesanales.

No menos frecuente es en Alhaurín El Grande, que es el municipio más poblado de cuantos utilizan esta expresión en Málaga. En el pueblo que cautivó en su día a Antonio Gala, se pueden ver alusiones a 'El Lugar' o 'El Lugá' en redes sociales y en las denominaciones de muchos establecimientos, como una cadena de restaurantes que tiene establecimientos allí, en Fuengirola y en el centro de Málaga, una empresa que distribuye frutas y verduras ecológicas ('La Huerta del Lugá') o incluso un club de tenis de mesa.

Por su parte, en Alfarnate es igualmente frecuente la referencia a 'El Lugar' entre sus vecinos y oriundos que viven fuera de allí. Y también se usa el vocablo para denominar a una casa rural, una asociación de madres y padres de alumnos.

Igualmente, en Casabermeja, es habitual encontrar algunos negocios con esa curiosa denominación, como tiendas de ropa, un apartamento turístico o incluso una marca de ajoblancos y gazpachos que se elaboran en la misma localidad.

También existen otros pueblos de Málaga y otras provincias andaluzas donde se puede escuchar referencias similares, aunque no son tan habituales en la actualidad como los casos de Alhaurín El Grande, Alfarnate, Casabermeja, Almáchar y El Borge.