Navidad y buen tiempo: los accesos al centro de Málaga, colapsados en pleno puente

Aunque al centro no se llega únicamente en vehículo privado, quienes hacían uso del transporte público presentaban también los efectos de la atracción que ejerce calle Larios o Muelle 1. Diego y Dalía salían a la superficie en Atarazanas tras haber viajado en suburbano procedentes de Puerto de la Torre: «El metro venía a tope. No cabíamos. Ha habido gente que no se ha podido subir al vagón y se ha tenido que quedar en el andén», decían, pasada la una y media de la tarde. Y es lo que se presume que suceda por la tarde, cuando comience el espectáculo de luces navideñas en el centro, tal y como cuentan Domingo Cano y su familia, de Ciudad Real, que lograron encontrar sitio en un chiringuito de La Malagueta para comer: «Ayer a las ocho de la tarde el metro estaba muy agobiante. Es que somos muchos y queremos ir todos a la misma hora al mismo sitio».

Efectivamente, el centro de Málaga es un hervidero este sábado. Cristóbal Barrionuevo y Toñi Gutiérrez, que habían aprovechado la mañana para adelantar alguna compra navideña, cuentan a SUR que les es imposible encontrar un sitio para comer: «Lo que era típico, comprar y luego comer algo por el centro, ahora es imposible», se quejan a pocos metros de 'Los Mellizos', que está a reventar y con una enorme cola esperando mesa. «Nos está yendo requetebién. Tenemos mucha más clientela que un sábado normal, hay reservas y gente que aparece sin reserva; hay muchos de vacaciones y se nota», comenta uno de los camareros de ese establecimiento.

Si el tráfico se ha colapsado, el adjetivo que usan Mario Hernández y Esmeralda Coleto para hablar de cómo está la ciudad estos días es «saturada»: «Hay demasiada gente y no se disfruta del centro. Hemos venido a recoger unas cosas que habíamos comprado, pero nos vamos a ir a comer a un barrio de las afueras. Por estas fechas y por Semana Santa está todo igual y a veces evitamos el casco histórico».

Pero esa incomodidad del día a día que sufren algunos convive con el atractivo que los visitantes ven en la ciudad: Audrey, irlandesa, ha venido con media docena de amigas a celebrar su amistad de cuarenta años y cumpleaños de alguna de ellas. Están en Muelle 1 disfrutando del sol: «Este clima es fantástico. En Irlanda hace mucho frío y hay tormenta».

Y llegan también visitantes de lugares más cercanos, como la pareja que forman Rosa María Fernández y José Carlos Gutiérrez, que hacen cola para comer en Casa Lola, en la calle Granada: vienen de La Línea de la Concepción (Cádiz): «Nos llamaba la atención el tema de las luces y además queríamos ver el casco histórico de Málaga, que no lo conocíamos y nos parece precioso, tiene mucho ambiente, es para repetir».