Málaga cierra el año hidrológico con dos embalses en mínimos históricos y nivel rojo de sequía

Son datos del informe anual de la Red Hidrosur, dependiente de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, que es la que se encarga de registrar los niveles de los embalses, de los ríos y de procesar los datos de las diferentes estaciones y puntos. Si hablamos de temperaturas, no se ha cerrado el año con ninguna máxima histórica, si bien las curvas de temperatura media son superiores a las de la última década. Tampoco hay ningún tipo de récord marcado en cuanto a la lluvia.

Lo preocupante es que la Viñuela, que da de beber a una población de 200.000 personas en la Axarquía, almacena apenas 13,1 hectómetros, lo que representa el 8% de su capacidad. Y está en situación de embalse muerto. De este modo, la comarca oriental tendrá que seguir dependiendo de los trasvases desde Málaga capital gracias al acuerdo entre las empresas Emasa y Axaragua. A medio plazo, la única gran obra encaminada a paliar el gran reto de la sequía es la conexión entre las depuradoras del Peñón del Cuervo y Rincón de la Victoria para la ampliación de las aguas recicladas para riegos y limpieza. Aportarán, en este sentido, unos 9 hectómetros cúbicos anuales. A largo plazo, habrá que confiar en la mejora de las conexiones y al proyecto de una desaladora para la zona.

En el Guadalhorce, el pantano del Conde apenas suma 11,5 hectómetros, un 17% de su capacidad. La totalidad de los embalses de la provincia almacenan 128 hectómetros cúbicos, lo que representa un 21% de su capacidad. El prácticamente la mitad de lo que tenían el año pasado por estas fechas.

Los registros de lluvias se sitúan muy por debajo de la media. En algunos casos, el volumen de agua recogido no alcanza la mitad de lo normal. Es el caso de El Torcal, que registró 275 litros por metro cuadrado, cuando su media es de 571; El Atabal, con 221 (444); Palacio de la Tinta, 194 (451); la Laguna de Fuente de Piedra, 196 (405); el referido Conde del Guadalhorce, 195 (440); Casarabonela, 275 (615), o Bobadilla, 157 (357).

Los lugares más lluviosos de la provincia han sido la Majada de las Lomas, en Cortes de la Frontera (640 litros por metro cuadrado); Ojén (601); Pujerra (600), y Jubrique (599).

En este contexto, cobran especial relevancia obras históricas que siguen en los cajones de la Administración. Entre ellas, cabe destacar el recrecimiento de la presa de La Concepción; la mejora de las conexiones Costa del Sol-Málaga para poder trasvasar agua desde la zona más lluviosa de la provincia a la capital y a la Axarquía; el azud o la presa del río Grande, o la corrección de los vertidos salinos del embalse del Guadalhorce