Málaga va camino de superar los dos millares de ERTE y puede llegar a los 100.000 trabajadores afectados
Entre los expedientes ya presentados hay empresas de todos los tamaños y sectores: de hoteles a concesionarios, industrias, panaderías o clínicas dentales
Si la epidemia en el terreno sanitario se llama coronavirus, en el laboral se llama ERTE. Este acrónimo que hace referencia a despidos temporales, se ... ha colado en el lenguaje cotidiano igual que lo ha hecho el Covid-19. Desde que entró en vigor el estado de alarma y con él, el cierre obligatorio de comercios, bares, restaurantes, establecimientos de ocio, centros educativos y otros negocios, cientos de miles de trabajadores se han quedado sin tarea que realizar y sus respectivas empresas, sin ingresos.
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La consecuencia de esta inactividad no se ha hecho esperar: cientos de expedientes de regulación de empleo se están preparando y presentando en estos días. El Gobierno ha facilitado su tramitación permitiendo que se canalicen por la vía exprés (no más de cinco días laborables) que marca la «causa de fuerza mayor». A nivel regional, la Junta de Andalucía tiene constancia de 18.124 solicitudes de ERTE presentadas desde el 16 de marzo. El gobierno andaluz no aporta datos provinciales, pero los sindicatos estiman que en Málaga se pueden superar los 2.000 entre los presentados y los que están en preparación. Empresas de todos los tamaños y sectores están recurriendo por igual a esta fórmula jurídica que permite poner en suspenso los contratos, de forma que los trabajadores pasan al desempleo con el compromiso de la empresa de reincorporarles en un plazo concreta.
En realidad, la cifra de expedientes presentados no es tan relevante, ya que hay «expedientes de un solo trabajador y expedientes con cientos de afectados», indica el secretario general de CC OO Málaga, Fernando M. Cubillo. En cuanto a número de trabajadores afectados, considera que se pueden superar los 100.000 en la provincia.
Solamente contando los hoteles que han cerrado sus puertas en la provincia (que según indicó ayer la Federación Andaluza de Hoteles y Alojamientos Turísticos, son 184), habrá 12.000 despidos temporales. Según el secretario provincial de CC OO, los establecimientos de este sector se están tomando su tiempo para presentar los expedientes, ya que tienen dudas legales sobre la conveniencia de acogerse a la causa de fuerza mayor. «Parece que en ese caso tendrían que reincorporar a los trabajadores en cuanto se levante el estado de alarma y los hoteles no van a estar llenos de clientes de forma inmediata», explica.
La responsable de Servicios del mencionado sindicato, Lola Villalba, destaca el comportamiento «responsable» de la gran mayoría de empresas hoteleras, aunque advierte de que plantará batalla contra las cadenas que no están incluyendo en las suspensiones a sus trabajadores fijos discontinuos. «Es un agravio comparativo porque así no pueden beneficiarse de la mejora de la cobertura de la prestación por desempleo que ha habilitado el Gobierno para estos ERTE», afirma.
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Dentro del sector servicios también se han caído por completo los ramos del comercio, la restauración y el ocio, así como los negocios auxiliares del turismo: desde las empresas que viven de la actividad aeroportuaria (Ryanair, Aviat Partnet o Ferrovial Check-In) hasta panaderías industriales (Casa Kiki o Cripán). También están planteando ERTE restaurantes, gimnasios (Aviva), cines (Yelmo), centros de ocio (Selwo), campos de golf o empresas de transporte (como Portillo). Entrando en el comercio minorista, destacan los de concesionarios y talleres de automoción (Caetano Motor, Torino, Cumaca o C. Salamanca, Sama o Goaz). Tampoco se libran el sector textil (Mayoral o Sonia Peña) o las telecomunicaciones (Cotronic).
Los afectados por ERTE no tienen que pedir la prestación: la tramitará su empresa al SEPE directamente
Atender las solicitudes de decenas de miles de personas en cuestión de una semana ya sería un reto difícil de cumplir. Si a eso se suma que el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) mantiene cerradas sus oficinas de atención al público, el colapso en la tramitación de prestaciones de desempleo sería inevitable. Por eso se ha establecido como medida excepcional que los trabajadores afectados por un ERTE no tienen que solicitar cita previa con el SEPE, ya que la gestión de su prestación se tramitará directamente entre su empresa y este organismo. Quienes hayan sido despedidos sin mediar ERTE tienen que pedir cita previa telemáticamente, pero con la facilidad de que se suspenden plazos en la presentación de solicitudes.
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