Javier López, primer medallista malagueño en un mundial de FP

La organización decidió no otorgar medallas de plata y bronce. En su lugar, se han repartido cuatro medallas de oro y cinco de excelencia, pues las puntuaciones finales estaban muy apretadas. La segunda medalla andaluza, también de excelencia, la ha conseguido Francisco Castilla Mariscal, del IES Himilce de Linares, en Peluquería. España ha logrado en total una medalla de bronce y 9 de excelencia en las diferentes modalidades de la competición, que este año se ha desarrollado por diferentes países. También ha participado en los WorldSkills International la malagueña Lucía Cabrera, en la modalidad de Cuidados auxiliares de enfermería. Tanto Javier como Lucía habían ganado las medallas de oro en sus respectivas modalidades en la competición nacional, lo que les sirvió para poder representar a España en el mundial.

Javier López califica de «impresionante» la experiencia vivida en Dresde. Fue a competir, consciente de sus limitaciones, y el resultado no ha podido ser mejor, una medalla de excelencia, que podría haber sido de otro metal si no le hubieran traicionado los nervios en una de las pruebas fundamentales.

Francisco Rodríguez, su tutor, y Álvaro Sánchez, experto, le acompañaron en la competición. Como lo han hecho en los últimos meses en los que le han estado preparando. Ambos son profesores en el IES La Rosaleda, donde Javier estudió el grado Medio en Mantenimiento de Vehículos. Ahora está en el Politécnico Jesús Marín, en un ciclo Superior de Automoción. A la delegación se sumó un experto nacional, Alberto Barrios, del instituto Río Tormes de Salamanca.

Francisco Rodríguez y Álvaro Sánchez consideran que el resultado obtenido por Javier es «excepcional», teniendo en cuenta las condiciones en las que participan los diferentes países y la preparación con la que llegan los jóvenes. Así, por ejemplo, explican que España es de los pocos países que participan en el mundial antes que en el europeo, por lo que los españoles llegan con menos práctica en un certamen internacional.

Otra cuestión curiosa es que hay países que acuden con preparadores físicos, nutricionistas, intérpretes y psicólogos para ayudar a sus estudiantes. Por no hablar de la intensa preparación para los campeonatos mundiales. «Chinos y coreanos nos comentaban que están dedicados por completo a los Skill durante dos años, trabajando todos los días de la semana», comentaba Francisco Rodríguez. En el caso de Javier, estudia por la mañana en el Jesús Marín y por las tardes acude a los talleres de La Rosaleda, a prepararse con Francisco y Álvaro, que tienen que dedicarle su tiempo libre después de su horario de clase. «Con los pocos recursos, tiempo y facilidades por parte del Ministerio de Educación hemos conseguido una medalla de excelencia», señala Álvaro Sánchez orgulloso de lo conseguido por su alumno.

De esta manera, los tres coinciden en que «en España no nos tomamos en serio este campeonato de FP». Paradójicamente, los campeonatos de FP surgieron en España, con la celebración en 1946 de un primer concurso nacional. El salto internacional se dio en 1950, con la participación de España y Portugal.

En la especialidad de Mecánica participaron 24 países. Los candidatos se enfrentaron a diez pruebas en total. Javier asegura que hizo una buena competición, con pruebas en las que alcanzó la máxima puntuación, como fue la del simulador. «Había hora y media para resolverla, y lo hice en 20 minutos». Pero los nervios le jugaron una mala pasada en la mañana del último día, en la prueba de frenos. Álvaro recuerda que Javier encontró la avería, pero no supo explicarla bien a los jueces. El resultado es que no puntuó.

«El idioma ha sido otro de nuestros hándicaps, el inglés es el idioma oficial de la competición, y Javier dedicó las últimas dos semanas a prepararse más a fondo. Hay países que ponen intérpretes, pero no es el caso de España. Aún así, hizo un papel extraordinario», señala el profesor, que valora el esfuerzo realizado por el alumno: «Tenían que levantarse a las 7 de la mañana y las pruebas terminaban a las 5 de la tarde. Aprovechábamos la hora de la comida para transmitirle ánimos, porque también hemos tenido que hacer de psicólogos», bromea Álvaro Sánchez.

«Entramos en la historia de la competición», afirma el profesor del IES La Rosaleda, con esta primera medalla de excelencia para un alumno malagueño. Un reconocimiento que tiene mucho más mérito cuando se valoran los escasos medios con los que han contado. Apenas dos meses de preparación cuando otros competidores han estado dos años, la juventud de Javier, con 19 años frente a los 21 de la mayoría de sus contrincantes. Y unos medios muy limitados. «El ministerio ni nos incluyó –a Francisco Rodríguez, tutor, y a Álvaro Sánchez, experto– en la delegación española; ha tenido que ser la Junta la que nos enviara a Alemania», lamenta el profesor.

Álvaro ha regresado de Dresde orgulloso de lo conseguido y confiado en que en el campeonato europeo de este próximo mes de septiembre podrá alcanzar un mejor resultado. Su participación en el mundial le ha dado la confianza y seguridad necesarias para afrontar este nuevo reto con todas las garantías de éxito.