

Secciones
Servicios
Destacamos
Mejorar el rendimiento de las empresas y su posicionamiento dentro de un mercado cada vez más competitivo y global se ha convertido en un reto imperioso para los comercios. Para ello, y con el objetivo de desarrollar actividades relacionadas con la innovación y modernización del sector minorista, la Junta de Andalucía ha elaborado una guía sobre prácticas innovadoras que pueda servir como ejemplo a los empresarios.
El documento editado por la Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo desglosa hasta 17 iniciativas innovadoras que abordan toda la cadena de valor, desde la misión de la empresa o el diseño del embalaje, hasta el uso de las redes sociales o las criptomonedas.
La extensa guía arranca desglosando los retos a los que se enfrenta el comercio minorista en los próximos años. Entre ellos destaca la creciente conciencia colectiva en torno a ciertos valores sociales; el nuevo papel que adquieren las tiendas físicas, que no deben ser únicamente lugares donde comprar; la aparición de marcas directas al consumidor que alejan a los clientes de los establecimientos físicos; el creciente número de plataformas de compras o la imperiosa necesidad de adaptarse digitalmente.
Concienciación social
La concienciación sobre aspectos sociales como la igualdad de género, el respeto a los animales o el cuidado de los ecosistemas adquieren cada vez un papel más relevante en la sociedad. Por lo tanto, implementar pequeñas acciones que les hagan mostrar su concienciación frente a determinados temas puede ser una opción innovadora. A modo de ejemplo, la guía cita el caso de los comercios del Centro Histórico de Málaga, que colocaron el pasado mes de mayo una pegatina en sus escaparates para apoyar a las mujeres frente a la violencia machista.
Los autores del manual afirman que la sociedad actual, y especialmente la juventud, necesita referentes auténticos y diversos con los que identificarse. Por ello, utilizar fotografías de personas para promocionar sus productos puede ayudar a los clientes a elegir aquellas que representen rasgos diversos, sin ser necesariamente modelos que rocen la supuesta perfección.
Imagen
El consumidor actual tiene unas crecientes exigencias en torno al producto. Más allá de su calidad o durabilidad, el embalaje puede jugar un papel fundamental en cómo el usuario percibe al producto o comercio: innovador, de calidad, comprometido… En esta línea, señalan que se pueden implementar iniciativas con distinto grado de complejidad. Desde aspectos sencillos como la utilización de colores que llamen la atención o incluir una pequeña tarjeta escrita a mano en los pedidos como agradecimiento, hasta el diseño de embalajes que lancen un mensaje e inviten a la reflexión o al juego.
Conexión emocional
La crisis sanitaria del coronavirus ha provocado un sentimiento colectivo de apoyo a lo cercano que puede ser explotado por los establecimientos. En esta línea, los autores del estudio consideran que poner en valor la venta de productos de la tierra puede reforzar ese sentimiento de pertenencia y de apoyo al prójimo, conllevando, además, una conexión emocional con la marca o el comercio. Para aprovechar esta iniciativa, recomiendan utilizar carteles que destaquen la procedencia de los productos, fotos de las personas que los producen o historias de las marcas que hay detrás.
Nuevos servicios
Introducir servicios adicionales también puede ayudar a crecer a un negocio. La guía recomienda establecer alianzas con las empresas de mensajería para convertirse en puntos de recogida. Con este, los beneficios principales son dos: ingresos extra por la nueva oferta y un posible aumento de la clientela, ya que las personas que entren al establecimiento pueden llegar a interesarse por sus productos. A modo de ejemplo, exponen que Casa Fernández, ubicado en el barrio de Triana de Sevilla, ha aumentado su facturación un 30% a través de la venta cruzada.
Agilizar los repartos
Las expectativas de la clientela en torno a los plazos de entrega son cada vez mayores, ya que los clientes desean obtener sus productos en el menor plazo posible. Una opción para agilizar es generar alianzas con servicios de reparto de última milla como los que ofrece Glovo o la contratación compartida de un servicio exclusivo de entrega. Como comercio destacado citan el caso de la Librería Luces, que se ha sumado a la contratación de un servicio de entrega compartido con otros comercios de su proximidad con los que no compite en producto.
Comercio social
Con 5.472 millones de usuarios en conjunto, Facebook y YouTube se han convertido en herramientas clave para la venta de productos. Esta tendencia, conocida como comercio social, se caracteriza por ofrecer al consumidor una vía más fluida de compra en línea, ya que permite a los usuarios adquirir productos sin necesidad de entrar en la página web. En esa línea, una tendencia cada vez más usada es la contratación de 'influencers'. Uno de los que ha comenzado a explorar esta vía ha sido Juguetes Nidotoys, en Córdoba. Aunque las personas que efectúan las compras son adultas, esta empresa utiliza un lenguaje orientado a los niños, ya que son ellos los que activarán la decisión de compra.
Compras más divertidas
Otra forma de innovar es incorporar el juego en el proceso de compra. Los autores de la guía entienden que si un comercio consigue integrar la diversión en algunas de sus actividades, estará generando un lazo emocional con su clientela, adquiriendo una dosis de frescura y siendo considerado como algo más que un sitio donde ir a comprar: un lugar que ofrece experiencias asociadas al divertimento y la felicidad. Algo así ha logrado la librería Fabulando, que utiliza su perfil de Instagram para realizar recomendaciones de libros, promocionar firmas de ejemplares e incluso anunciar la visita de personajes disfrazados.
Integrar las redes sociales
El encierro provocado por el Covid ha modificado la forma de comprar de miles de personas. Según un estudio realizado en Reino Unido, uno de cada cinco compradores recurrieron en aquel momento a videollamadas con una o varias personas cercanas en el momento de realizar una compra a través de Internet para obtener consejo o su aprobación. Y eso es precisamente lo que puede ayudar a impulsar un negocio: poner en marcha espacios digitales en los que la compra a través de internet, que hasta ahora se resolvía de una manera muy individual, pasa a ser social.
Realidad virtual
Abrir una tienda virtual en la red puede ser una experiencia innovadora y potencialmente explotable a nivel comercial. De este modo, una persona puede acceder a una tienda virtual y vivir la experiencia del lugar físico sin necesidad de desplazarse. Mediante el uso de la tecnología podría pasear por los pasillos y acercarse a los diferentes stand. Un referente en el uso de este tipo de realidad virtual es la empresa Silbon, que permite a todos los usuarios visitar sus instalaciones y adquirir productos de la firma.
Mejorar la eficiencia
La guía enumera otra serie de iniciativas innovadoras como fomentar las compras en grupo, la utilización de un software de gestión empresarial, la contratación de servicios de almacenamiento en la nube para gestionar mejor los inventarios o el uso de la realidad aumentada. También reseña ejemplos del uso de inteligencia artificial para hacer más eficientes la gestión y la planificación, de robots para optimizar los procesos logísticos, de la tecnología de cadena de bloques o 'blockchain' para facilitar los sistemas de pago y de tokens no fungibles o NFT.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Da a luz en la calle a la salida de unos cines de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.