Padres se rebelan contra los comedores escolares: «La sopa es agua»

Lo que han tenido que escuchar este sábado los responsables de la Junta de Andalucía que externalizan el servicio de los comedores escolares a empresas de catering no ha sido agradable. Unos 200 padres, provenientes de toda la provincia, se reunieron este sábado en la calle Larios para exigir una comida saludable para sus hijos y pidieron que los colegios se doten otra vez de cocinas para que los alimentos se puedan preparar 'in situ'.

Según la plataforma de Comedores Dignos, responsable de articular la protesta, que fue secundada por representantes políticos del PSOE, Izquierda Unida y Podemos, en Málaga hay unos 30 colegios públicos que suspenden de «manera rotunda» cuando se analiza la comida que le sirven a los alumnos que hacen uso del comedor escolar.

Lo ideal y lo que también se fija en los pliegos que redacta la Consejería de Educación establece que el menú debería componerse, sobre todo, de verdura fresca, carne, pescado y piezas de fruta. La realidad, sin embargo, sería otra bien distinta.

Marina Ribot, que tiene a dos niños en el CEIP Rectora Adelaida de la Calle, habla de alimentos con mucha grasa y azúcares añadidos, y muy poca verdura. «Mi hijo ha aborrecido el pescado porque solo le sirven tilapia», precisó.

«La sensación de que la comida que se sirve en los comedores de los colegios públicos de la provincia es mala es una sensación generalizada», aseguraron varias padres consultados por este periódico. Prueba de ello, la capacidad de convocatoria de una manifestación que comenzó en la calle Larios y que terminó en la plaza de la Constitución con la ingesta de una comida no digna para estómagos de personas humanas.

Los padres que protestaron en la calle Larios exigen a la Consejería de Educación que la comida se vuelva a cocinar en los propios colegios. Cuadrar el círculo de ofrecer un buen menú a un precio barato, con la subida de precios de los alimentos, también se ha convertido en una tarea complicada para las empresas que tienen la concesión de este servicio.

Por esta razón, la candidata a la Alcaldía de Málaga, Toni Morillas, exigió a la Junta de Andalucía que se vuelva a un modelo de gestión pública para los comedores escolares. «Lo que nos encontramos es el resultado de un privatización, que está demostrando ser ineficaz, y que está dejando sin una alimentación adecuada a los hijos, sobre todo, de las familias más vulnerables», denunció.

La representante del PSOE en la Diputación, Patricia Alba, que fue delegada de Educación en Málaga con el último gobierno socialista en la Junta de Andalucía, también mostró apoyo a los padres en sus reclamaciones. «Es intolerable que haya niños y niñas que no reciban una alimentación saludable, que se les dé, simplemente, lechuga para que se sacien. Vamos a exigir a la Junta que ofrezca una solución cuanto antes», expresó.