Secciones
Servicios
Destacamos
Los malagueños y visitantes que quieran disfrutar de un buen día de playa puede estar tranquilos. Las misteriosas manchas naranjas que se pudieron presenciar ayer en la orilla de algunas zonas del litoral malagueño, como la playa de la Malagueta, conocidas también como mareas rojas, son inofensivas para todos los que quieran combatir el calor y el bochorno de un día como el hoy con un buen chapuzón, aunque su aspecto no sea muy agradable. Al menos, así lo asegura el catedrático de Botánica y decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Málaga, Antonio Flores, que ha recalcado que se trata de un fenómeno natural y cíclico en puntos como la desembocadura del Nilo, y en muchos litorales de los mares templados de todo el mundo, como el Mediterráneo occidental y la Costa del Sol.
Este fenómeno se debe al crecimiento masivo de unos microorganismos denominados dinoflagelados. Se forman lejos de la costa a inicios del verano, favorecidos por el aumento de la temperatura y el aumento de nutrientes, dando al agua un color ferruginoso. Flores insiste en que no supone ningún riesgo para los bañistas al ser inocuos.
También se conocen las mareas pardas; en este caso, están ligadas al crecimiento masivo de unas microalgas denominadas diatomeas.
Las mareas rojas y pardas, según Flores, pueden dar lugar, en algunos casos, a problemas de toxicidad ya que algunas especies sintetizan toxinas. Estas toxinas se acumulan en animales filtradores y, a partir de ellos, pueden pasar a otros organismos. Por esta razón se hace una vigilancia constante de los moluscos antes de que se comercialicen.
La marea roja que ha alcanzado estos días el litoral malagueño está formada por microorganismos de la especie Noctiluca scintillans. Su nombre significa, según el decano de la Facultad de Ciencias, «que brilla en la noche», y es conocido comúnmente como «chispa de mar». Es luminiscente (emite luz) producida por un sistema de luciferina, la cual reacciona con el oxígeno y provoca un destello de fluorescencia de color azul, especialmente apreciable de noche, cuando se produce movimiento o vibración en la superficie del agua (por ejemplo, el paso de un barco).
Igual que ha aparecido -se detectaron ayer frente a las costa de Rincón de la Victoria al mediodía- la marea desaparece. «Suele desaparecer pronto y queda disuelta en el mar», ha explicado Flores. De manera que los que quieran celebrar la Noche de San Juan con un buen baño, pueden hacerlo sin problema., aunque muy probablemente la marea estará ya disuelta.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Terelu repetirá en el Zorrilla tras aplaudir el público en pie su debut en el teatro
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Gran apagón nacional: así está afectando a Málaga
Ignacio Lillo
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.