Chiqui Gutiérrez del Álamo: «La política, como el feminismo, no se quita con la edad»
Exdiputada andaluza del PSOE, jubilada desde hace siete años, la que fue una de las siete primeras mujeres en el Parlamento andaluz se muestra especialmente indignada por el drama de los refugiados
Nuria Triguero
Domingo, 20 de marzo 2016, 18:41
Se llama Hortensia, pero sólo en las crónicas oficiales del Parlamento Andaluz aparece así citada. Para su familia, la de sangre y la del PSOE ... malagueño, es Chiqui Gutiérrez del Álamo, una de las pioneras del socialismo y el feminismo andaluz. Fue una de las siete primeras mujeres que se sentó en la Cámara andaluza, donde permaneció hasta el año 2000. Previamente había dirigido el Centro Asesor de la Mujer, donde trabajó codo con codo con su gran amiga Carmen Olmedo, fallecida el año pasado. Esta misma semana recibía emocionada el premio que lleva su nombre.
Publicidad
¿Qué sensaciones le despierta este premio?
Me ha hecho mucha ilusión porque es el premio Carmen Olmedo para Chiqui. Y Carmen y yo hemos sido compañeras y amigas, desde que coincidimos en el Centro Asesor de la Mujer cuando se fundó, en el año 78.
¿Cómo vive la política desde su condición de jubilada?
Yo tengo 72 años, estoy jubilada desde hace siete y dejé el Parlamento andaluz en el 2000. Pero la política, igual que el feminismo, no se quita con la edad. Es para siempre. Así que la vivo con mucho interés y en este momento también con mucha inquietud porque hay una situación muy complicada. Por ejemplo, el tema de los refugiados me tiene muy alterada. Somos europeos; queremos una Europa solidaria, acogedora. Y me siento mal por la actitud que están teniendo nuestros dirigentes. Es que no puede ser, van a acoger sólo a 160.000 cuando en Jordania, que es un país pequeño y pobre, hay 600.000. Y eso de expulsarles a Turquía... No se puede tratar así a la gente. Europa dejará de ser Europa como se consienta eso.
¿Qué opina de la situación política nacional?
Tengo la suerte de verla desde la barrera, porque mira que está complicada. Me gustaría, por supuesto, que Pedro Sánchez fuera presidente.
¿Pero pactando con quién?
Yo no soy quién para decir con quién tiene que pactar. Pero creo que hay posibles acuerdos o arreglos. Y lo peor sería volver a repetir las elecciones. Realmente los ciudadanos hemos votado para que haya esta situación. Y todas las encuestas nos dicen que saldría un resultado muy parecido. Habría que llegar a un acuerdo: eso es lo que los ciudadanos queremos. Y el PSOE y Ciudadanos ya han hecho un esfuerzo, han pactado. Ahora se trata de que los demás partidos apoyen este pacto porque ahora mismo son los que suman más diputados.
Publicidad
Como veterana del PSOE, ¿qué opina de la nueva política?
Por supuesto, a mí me gustaría que el PSOE tuviera más votos. Pero es bueno que haya gente que se dedique a la política con pasión, y también que haya más opciones políticas, eso es democracia. Sí me parece que los partidos nuevos también tienen que aprender: un poco de nosotros, un poco de ellos mismos... Como nosotros hicimos en su día.
Usted fue pionera en la lucha por la igualdad de la mujer en Andalucía. ¿Estamos mejor ahora?
Se ha avanzado muchísimo, el mundo es otro. Y las legislaciones que se han aprobado en España, tanto la ley de igualdad como de violencia de género, son hitos muy importantes. Pero muchos de los problemas que veíamos en los 80 en el Centro Asesor de la Mujer son los mismos. Por ejemplo, la violencia. Lo que pasa es que ahora hay instrumentos, recursos, que antes no había. Siempre me acuerdo cuando Carmen [Olmedo] y yo acompañábamos a una mujer a la comisaría para poner una denuncia, con los brazos machacados de cardenales, y los policías no nos hacían ni caso. Hoy no solamente han formado a los policías, sino que hay casas de acogida, juzgados especializados...
Publicidad
¿A qué cree que se debe ese repunte de actitudes machistas en las nuevas generaciones, del que alertan ya numerosos estudios?
Quizá las redes sociales han empeorado ese acoso. Y creo sinceramente que la asignatura de educación para la ciudadanía es vital. Los niños y las niñas tienen que aprender a respetarse. De verdad: educación, educación, educación. Se nos olvida que este país hace poquísimo era una dictadura y en las familias muchas veces se transmite una manera de actuar que hay que corregir. Y eso no se corrige con leyes, sino educando a la gente.
¿Qué le diría a las mujeres que opinan que el feminismo está pasado de moda?
Pues que cuando empecemos a ser más iguales, empezamos a hablar. ¡Si se ve en los partidos políticos, en las reuniones de la UE o del G-20! Tú ves las fotos y hay 25 varones y 2 mujeres. Eso no es igualdad, ni se le parece. O mira en las empresas del Ibex...
Publicidad
¿Cuáles son el mejor y el peor recuerdo que guarda de su trayectoria política?
Uno bueno fue ganar las elecciones del 82 y la constitución del Parlamento de Andalucía. Durante aquella legislatura fuimos siete mujeres. ¿Y un momento malo? Pues la enfermedad de Carmen, que para muchas compañeras del partido fue muy dramática porque era una persona muy valiosa, que hizo muchísimo por las mujeres.
¿Alguna espinita que se le haya quedado clavada?
Yo no he sido de tener ambiciones personales... Una cosa que sí me apena es que la Ley de Dependencia no haya tenido desarrollo suficiente.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión