Ventanas de guillotina
Málaga a trazos ·
En la calle Juan Varela hay una bellísima e imponente casa, que no desentonaría en los bosques de Massachusetts, también provista de ellas
Desde las praderas del Medio Oeste americano a los apartamentos de Brooklyn, no hay hogar norteamericano que no se asome al exterior mediante la omnipresente ... ventana de guillotina. Ya sea en los cuadros de Hopper o en las películas de Woody Allen, tal dispositivo nos resulta tan familiar como enigmático, por su aparente desafío a la atracción gravitatoria: ¿existe un peligro real de decapitación? ¿Cómo se sostiene la hoja ahí arriba? ¿Hay que ejercer una fuerza hercúlea para subirla hasta su posición abierta?
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Son preguntas que acuden a nuestra mente mediterránea por la lejanía cultural que suponen con respecto a las ventanas batientes que en nuestro entorno se estilan. ¿Hay que viajar hasta un país anglosajón para verlas en vivo? No. En la calle Juan Varela hay una bellísima e imponente casa –que no desentonaría en los bosques de Massachusetts- también provista de ellas.
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