El último pleno: tensión y tono electoral

Comenzaba el debate a instancias tanto del grupo socialista como el de Málaga Ahora, que aprovecharon sus últimas mociones de la legislatura para dar visibilidad a la «falta de responsabilidad» del alcalde y su equipo de gobierno con la gestión de algunos de los conflictos «que se mantienen abiertos en esta ciudad paralizada», tal y como denunciaba el portavoz socialista, Daniel Pérez. Antes de su intervención, crecida por los resultados del pasado domingo en los que el PP se sitúa por segunda vez consecutiva como tercera fuerza en la capital por detrás del PSOE y Cs, Pérez daba voz a los representantes de los bomberos y la policía local para que expusieran (una vez más) la falta de sintonía con el equipo de gobierno en la negociación de sus peticiones. «Alcalde incapaz» o «usted improvisa» fueron algunas de las acusaciones que desde el atril de invitados le dedicaban a De la Torre los portavoces del colectivo, aunque el tono se elevaba mucho más en el momento del debate entre los grupos, donde los bomberos intervinieron varias veces a pesar de no tener ya el turno de palabra.

«Usted se ha reunido hasta con los okupas de esta ciudad, ¿y no es capaz de reunirse con sus funcionarios?», le recriminaba el viceportavoz de Ciudadanos, Alejandro Carballo, al regidor avanzando que su grupo se pondría del lado de la oposición. Mientras, Pérez le recordaba una y otra vez a De la Torre que «los malagueños hablarán el día 26 de mayo». «Recuerde que no estamos en campaña electoral, sino en un pleno», le cortaba el alcalde al portavoz socialista mientras el murmullo en la tribuna de invitados iba 'in crescendo'. «¡Yo tengo que dialogar aquí con los concejales, no con ustedes!», avisaba a los bomberos el alcalde recordando que el conflicto que exponen «es el problema de un sindicato que no representa a la mayoría de los trabajadores públicos». Pero la protesta en la tribuna de invitados ya se había desatado para entonces, hasta el punto de que fueron desalojados por la policía al grito de «¡Alcalde dimisión!» y «¡Todos a una!».

Y si parte de esa tensión quedaba ya fuera, de puertas adentro los grupos de izquierdas se ponían de acuerdo (con la abstención de Cs) para sacar adelante el texto socialista en el que se censuraba al equipo de gobierno por esa «inacción» no sólo en el caso de los bomberos en la policía; también en la «política de nula conservación patrimonial» en los casos de Villa Maya o La Mundial o el «expolio de las plusvalías». El 'sí' de Ciudadanos a la moción Málaga Ahora reconociendo el trabajo de los bomberos visibilizó la soledad del equipo de gobierno en este asunto.

Sobre la nueva legislatura, en este caso la que se abre en con el Gobierno central, debatían también los grupos para acordar las actuaciones e inversiones pendientes para Málaga. La moción llevaba la firma del PP y logró el acuerdo de todos salvo en la petición de una hiperronda entre Fuengirola y Chilches, que generó más debate y que fue duramente criticada por la portavoz de Málaga Ahora, Ysabel Torralbo, «por su impacto ambiental». «Esto no tiene nada que ver con los foros a los que usted va», ironizaba la concejal de izquierdas. Aún así, los grupos dieron su 'sí' a proyectos pendientes como el Auditorio, la biblioteca pública del Estado o la renovación del paseo marítimo de Pedregalejo. Y ahí se producía el último desencuentro entre el alcalde y el edil socialista Sergio Brenes –que no repetirá–, quien volvió a recordarle «su etapa en la Diputación en tiempos de Franco». De la Torre lo cortaba: «Lo hago educadamente para que guarde el buen recuerdo de un presidente (de pleno) flexible y demócrata».

Entre los cruces de reproches, hubo tiempo para más en el debate de dos mociones sobre 'fake news', donde los ediles sacaron a relucir, entre otras cosas, los últimos bulos que han circulado (y alimentado) en redes en la última campaña electoral. Y que se sumarán a la que está por llegar.