Toni Morillas: «Málaga debe ser un ejemplo para lograr la confluencia a nivel nacional»
Cree que Yolanda Díaz y Podemos llegarán a un acuerdo y celebra que la coalición lograda aquí acerca «el giro progresista» a la Casona
Izquierda Unida y Podemos aceleraron para alcanzar un acuerdo de última hora para ir juntos en las elecciones municipales al Ayuntamiento de Málaga. A escasas ... semanas de la cita con las urnas, las tensiones desatadas entre Remedios Ramos y Nicolás Sguiglia, que comparten por ahora bancada, se han orillado con una propuesta de obligado cumplimiento marcada por las direcciones estatales de ambas formaciones. Un acuerdo que ha colocado a Toni Morillas, la todavía directora del Instituto de las Mujeres, como candidata a conquistar la Casona del Parque.
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Este jueves, Morillas, que ya fue concejala hasta el 2015, estuvo en 'La Alameda', el programa que producen 101TV y SUR, y que presenta el director de este periódico, Manolo Castillo. La candidata de la confluencia, acuñada como 'Con Málaga', repasó los últimos giros y destacó el acuerdo alcanzado en Málaga como un hito que puede trascender al panorama nacional, donde Yolanda Díaz y Podemos mantienen un pulso cara a las elecciones generales que se celebrarán en diciembre. La vicepresidenta del Gobierno no tolera imposiciones 'moradas' en la configuración de Sumar mientras que la sombra alargada de Pablo Iglesias propone la celebración de unas primarias como condición para lograr una confluencia. En una tesitura que era similar a nivel local, Morillas aseguró que lo ocurrido puede ser un espejo para Díaz y los dirigentes de Podemos. «Málaga debe ser un ejemplo para lograr la confluencia a nivel nacional», señaló y se mostró convencida de que, finalmente, se alcance un acuerdo, aunque, por momentos, parezca inimaginable.
La capacidad de dispararse en el pie de la izquierda es conocida. La manera en la que llegó la candidatura de Morillas es solo un ejemplo más. La militancia local de IU votó en primarias a Remedios Ramos, que ahora ha sido relegada al número tres. Un mal estético, sin embargo, que para Morillas responde al objetivo superior de presentarse a las elecciones con las mejores posibilidades electorales, bajo el parámetro de la «unidad».
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A nivel nacional, para «hacer frente a una derecha cada vez más reaccionaria». Y a nivel local, para «acercar el giro progresista al Ayuntamiento de Málaga». En este sentido, agradeció a Ramos «el ejercicio de generosidad» realizado e insistió en que «no solo es compañera, también es amiga».
El posible distanciamiento con el votante natural de IU, que se haya podido molestar por las formas en la que se ha gestado la confluencia, lo quiere suplir Morillas con un programa y unas propuestas de modelo de ciudad sobre las que había «una coincidencia plena». Sobre el papel, espera una confrontación constante con el modelo representado por el PP y su candidato, Francisco de la Torre, que Morillas consideró «saturado».
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La candidata de la confluencia de izquierdas acepta que éxito electoral cosechado por el regidor, aunque consideró que el apoyo ha ido menguando en las municipales del 2019.
Oportunidad
La decisión de optar por una confluencia, precisó Morillas, ancla precisamente aquí, en la idea de creer en que esta vez sí se dan las condiciones para desbancar a De la Torre, una vez superado el riesgo de fragmentación de voto en la izquierda. «Estoy convencido de que hasta la semana pasada dormía más tranquilo. Esta candidatura que tenemos ahora es la herramienta más útil para plantear la disputa al PP», confío.
A nivel personal, su vuelta a la política municipal viene acompañada de una motivación extraordinaria. «Vengo con muchas ganas porque estamos viendo que el modelo planteado por el PP deja a mucha gente atrás. Se está produciendo la expulsión de la ciudad de los jóvenes y vemos como muchos no tienen garantizados derechos básicos como lo es la vivienda», resaltó.
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Para Morillas, el tema de la vivienda representa uno de los principales retos a los que se enfrenta la ciudad. Con el fin de facilitar el acceso, prometió políticas volcadas en ampliar el parque público de viviendas, además de una auditoria para ponerle cifra a los inmuebles que están vacíos, y una regulación para reducir el número de viviendas turísticas. En este sentido, aseguró que «debemos frenar el proceso de gentrificación a gran escala que se está produciendo en Málaga». Además, abogó por un modelo en el que «el beneficio y la riqueza que produce la ciudad se redistribuya para que llegue a todos los barrios y a las personas».
Sobre la gestión de De la Torre, aseguró que muchos asuntos de envergadura permanecen sin resolver desde que ella salió del Ayuntamiento en 2015. Puso como ejemplos al Guadalmedina, los Baños del Carmen, el paseo marítimo de El Palo o el parque de Arraijanal.
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Por último, Morillas se volvió a referir a su compañera de partido, Remedios Ramos. Esta vez para negar que en IU hubiera una investigación para ver si la ahora número tres estaba detrás de la creación de perfiles falsos en las redes sociales. «No ha habido ningún tipo de investigación», sentenció.
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