La espalda de calle Aguas, refugio de muchos

«La situación se ha deteriorado en los últimos meses, principalmente desde el confinamiento, y en la actualidad está ocupada por personas sin techo, que se han asentado allí, lo que implica que duermen, viven y hacen sus necesidades. Es cierto que los servicios municipales han respondido a las reiteradas peticiones de los vecinos afectados, con varias actuaciones, como visitas de la Policía Local, limpieza de la zona por parte de Limasa, intervención de los servicios sociales. No obstante, se vuelven a asentar en el mismo lugar horas o días después», explica Juan Pérez, vecino de la zona, que propone soluciones: «Se ha convertido en un problema social, ya que personas sin hogar están implicadas; medioambiental por el deterioro del monte y riesgo de incendios; de seguridad, ya que han ocupado varias viviendas, han robado en los patios y terrazas; y sanitario, especialmente en los tiempos que corren. La solución al problema podría pasar por urbanizar la zona y darle un destino específico para el uso ciudadano. Por ejemplo, podría construirse un parque infantil o un parque canino, uso al que los vecinos estaban habituados», señala.

Este periódico comprobó la situación de dicho espacio durante el día de ayer, confirmando el deterioro del lugar.