Así es el Dynasty, el primer megayate que va a hacer su invernada en la marina de Málaga

Este es, precisamente, el cometido para el que se diseñó años atrás la reforma de la rada comprendida entre los muelles uno y dos: recibir grandes buques y prestarles los servicios necesarios durante la temporada baja, para lo que las instalaciones están equipadas con acometidas eléctricas de alta potencia. Además de las escalas breves, generalmente de tipo técnico, de avituallamiento y para la subida y bajada de pasajeros, que se han venido produciendo estas semanas atrás.

El I Dynasty tiene previsto permanecer en la capital malagueña todo el otoño e invierno, en principio, hasta la primavera de 2024, según explican fuentes portuarias, que ponen de relieve que esta será la primera gran invernada en estas instalaciones para el buque y su tripulación, compuesta por 30 profesionales.

Además, el yate se someterá a numerosas tareas de mantenimiento a flote durante todo el invierno, para lo que la concesionaria del puerto deportivo, IGY Málaga Marina, está buscando proveedores de todo tipo en la provincia, con el objetivo de hacer una cartera de empresas locales especializadas en diversas tareas técnicas. Las fuentes comentan que ya existe un ecosistema de mantenimiento en Algeciras, y en caso necesario se recurrirá a sus servicios, pero los responsables de la marina de la capital quieren fomentar a las empresas locales y que se especialicen en servicios náuticos.

Aunque las tareas necesarias todavía no se han concretado, es previsible que se demanden servicios de lijado, pintura de casco, soldadura, electricidad, mecánica, carpintería, fontanería y mantenimiento, entre otros. IGY Málaga Marina está creando una base de datos de empresas interesadas, para lo que piden contactar directamente con ellos (pero en ningún caso se debe acudir al barco, donde el acceso además está restringido).

Por lo demás, el I Dynasty es un moderno superyate construido en 2015 por encargo de Alijan Ibragimov, un multimillonario de Kazajstán, cofundador de la multinacional Eurasian Natural Resources Corporation (ENRC), dedicada a los recursos naturales diversificados, la minería, el procesamiento, la energía y la logística. Su propietario falleció en febrero de 2021, supuestamente debido al Covid-19.

La nave fue construida en los astilleros Kusch Yachts de Alemania, con interiorismo de Massari Design, según los datos disponibles en la web especializada SuperYachtFan. Tiene capacidad para albergar a 22 invitados en 11 camarotes de lujo; y a 30 tripulantes en otras 15 cabinas. Entre sus instalaciones más características, cuenta con una piscina cubierta de 30 metros cuadrados, que también sirve como muelle para embarcaciones auxiliares y de recreo.

El barco está propulsado por un sistema de propulsión diésel-eléctrica Rolls Royce, con una velocidad máxima de 17 nudos, y una velocidad de crucero de 14 nudos. Su autonomía es de 6.500 millas náuticas (unos 12.000 kilómetros), lo que lo hacen especialmente adecuado para viajes entre el Mediterráneo y el Caribe, que son los dos escenarios más habituales para los recorridos de recreo de las grandes fortunas. Está valorado en unos 200 millones de dólares, con un coste de mantenimiento que se estima en 15 a 20 millones de dólares anuales.