«Si te dan la chapa o te agobian sin permiso, es una agresión sexista»
Una guía que se repartirá en feria advierte de que el roce sin consentimiento o los «supuestos piropos» también son formas de violencia machista
Algunas se sienten culpables. Otras ni siquiera son conscientes de que han sido víctimas de una agresión machista. Muchas de las preguntas que les hacen ... para reconstruir los hechos las responsabilizan de forma más o menos intencionada. «¿Cerró usted bien las piernas?», preguntó una jueza de Vitoria a una mujer que había sufrido una violación. Para evitar esta doble victimización y el cuestionamiento al que a menudo se ven sometidas las denunciantes, el Ayuntamiento de Málaga, la Diputación y la Junta de Andalucía han lanzado una campaña centrada en la prevención de abusos sexistas durante la feria, cuando suele registrarse un repunte de estos delitos.
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También la desinformación abre la puerta a las agresiones machistas. «Muchas chicas tienen dudas sobre qué puede denunciarse y qué no, y tampoco los orientadores tienen claro cuáles son los límites legales entre abuso y agresión, por ejemplo», explican la psicóloga Sara Olivares y la trabajadora social Patricia Gómez, coordinadoras de los dos puntos violetas que se instalarán en el Real. Es el cuarto año que esta iniciativa se pone en marcha para sensibilizar sobre la violencia sexista, aunque en este caso se ha editado una guía de prevención con el inequívoco lema de la campaña: «No es no. Solo sí es sí». La guía detalla posibles situaciones que supondrían una agresión sexista, desde el roce sin consentimiento hasta los «supuestos piropos», los tocamientos o «las humillaciones por no ceder».
«Casi siempre se culpa a la víctima por cómo va vestida, por haber caminado sola de noche o por haber quedado con un chico que acabará resultando su propio agresor, pero creemos que hay que dar la vuelta a las campañas para dirigirlas a los hombres, no a las mujeres. Si te dicen que no, es que no», sentencian Olivares y Gómez, contrarias a utilizar el miedo («No vayas sola», «no te acuestes con desconocidos») como herramienta de prevención. Por eso la guía apela directamente a los hombres («No asumas que sabes lo que una chica quiere», «El alcohol y las drogas afectan a tu juicio, pero no a tu responsabilidad»), pero también descarga de culpa a las mujeres: «No permitas que nadie te cuestione o te culpe por quejarte», «Si te dan la chapa o te agobian sin permiso, es una agresión sexista», «Vive tu sexualidad libremente con quien quieras y cuando quieras», «En cualquier contacto o relación sexual, tienes derecho a cambiar de opinión siempre», «Eres la agredida, no la responsable». Consejos que este año, como un martillo sobre la conciencia, podrán leerse en plena feria.
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