La Fiscalía pide 90 años de cárcel para los acusados de robar 162 kilos de droga del depósito del puerto

Casi dos años después de intensas investigaciones, la Policía Nacional detuvo los presuntos autores del asalto, que serán juzgados próximamente en la Audiencia Provincial de Málaga. Los cinco hombres imputados se enfrentan a penas que suman casi 90 años de cárcel por delitos de tráfico de drogas, robo con fuerza en las cosas, pertenencia a grupo criminal y uso de documento oficial falso.

La fiscal afirma en su escrito de calificación provisional que los acusados forman parte de un grupo criminal que se dedica de modo habitual al robo, no solo en Madrid, donde todos ellos residían, sino en cualquier punto del país donde fuera conveniente para sus intereses. Funcionaban como grupo desde 2005, aunque su número de integrantes variaba en función del objetivo, el momento y el lugar donde decidieran actuar.

Examen previo de la zona

Los cinco hombres, junto con otras personas que no pudieron ser identificadas, se trasladaron a Málaga el 11 de noviembre de 2011 y durante la madrugada y tarde del día 12 «acudieron a la zona del puerto para examinar el lugar y todo los movimientos que tenían planificados», asegura el fiscal.

La madrugada del día 13 llegaron al puerto en tres vehículos: una furgoneta marca Iveco que los acusados habían encargado robar el día antes en el Polígono Santa Teresa; un vehículo marca Mazda y otro Porsche Cayenne, propiedad de uno de los acusados. Este último portaba una matrícula falsa que había sido sustraída a otro coche en las inmediaciones del aeropuerto de Málaga. Sobre las 5,20 horas, los procesados inutilizaron el sistema de vigilancia del perímetro exterior, arrancando la centralita externa de la fachada y una de las cámaras. Luego cortaron los cables exteriores, fracturaron la campana acústica y penetraron en el almacén rompiendo la cerradura principal.

Una vez dentro del depósito anularon también sus sistemas de alarma y lograron acceder a la cámara acorazada donde se guarda la droga. Para abrir la primera puerta (la cámara tiene dos) hicieron uso de un soplete y una maza, logrando traspasar dos planchas de acero y hormigón. La segunda puerta, de rejas con una cerradura común, la forzaron con un objeto contundente. Se llevaron un total de 162 kilos de droga, de los que 133 eran de cocaína, uno de heroína, y el resto sustancias de diseño y otro tipo de psicotrópicos. También sustrajeron el disco duro de las cámaras de videovigilancia.

Salieron del puerto sobre las 7,20 horas y se dirigieron al Polígono La Huertecilla. Tras sacar la droga y ocultarla, incendiaron la furgoneta hasta para borrar pruebas.