«En mi mente vivo en un lugar en el que si no tienes pelo da igual, eres guapa»
El relato de Carlota, una niña de 13 años que padece una enfermedad de la sangre, forma parte de una exposición en la Semana de la Hematología
M. Ángeles González
Martes, 17 de junio 2014, 00:56
Carlota se define como una chica «diferente, poco peculiar». Hace un año, «un frío 3 de enero», una analítica «lo cambió todo de repente». Le ... diagnosticaron una enfermedad en la sangre que ha cambiado su forma de ver la vida. A sus trece años, esta niña dice que prefiere no pensar mucho en el futuro y «vivir el presente de la mejor manera posible», lo que no quita que tenga planes y de mayor quiera ser actriz o estudiar Medicina.
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Es parte del relato de una adolescente malagueña que estos días se exhibe en el Hospital Materno Infantil de la capital con motivo de la tercera Semana de la Hematología y Hemoterapia.Por la emoción que transmite, los organizadores de este evento eligieron su escrito entre todos los elaborados por niños hospitalizados o atendidos en consultas externas para inaugurar ayer las jornadas. La encargada de leerlo en el salón de actos de Carlos Haya casi no pudo reprimir las lágrimas, sobre todo en el fragmento en el que habla de las secuelas de su enfermedad. «En mi mente vivo en un lugar donde la apariencia física no importa, lo que importa es lo que cada uno es por dentro. Allí si no tienes pelo da igual, eres guapa. Pero por mucho que quiera no puedo vivir ahí», escribe Carlota.
La vuelta a la realidad «en la que si no tienes pelo, eres fea» le ha enseñado a «ignorar» esos pensamientos de la gente y a descubrir «que la vida es bonita cuando tú la ves así». «Me gustaría hacer mi vida cotidiana de antes, pero no puedo y ahora todo es diferente», continúa dejando entrever una fuerza y coraje tal vez impropios de alguien de su edad. «Lo diferente me gusta y no, no tengo miedo». Pero detrás de esa fortaleza hay una niña «que cuando llega a su habitación se hincha a llorar», como ella misma dice, aunque aclara que no de pena, sino para desahogarse. «Porque llorar parece una tontería, pero a veces las palabras no pueden decir lo que las lágrimas pueden expresar», relata.
Sus mensajes animando a no vivir del pasado, sino a aprender de él, o a poner al mal tiempo buena cara inundan de optimismo el escrito de Carlota, que puede verse hasta el viernes junto a relatos y dibujos de otros 30 niños en el Materno. Hasta ese día se desarrollará un completo programa de actividades en el Hospital Regional y en el Virgen de la Victoria para difundir entre la población, los profesionales sanitarios y las asociaciones de pacientes el trabajo clínico e investigador que se está realizando en la provincia en el campo de la Hematología y la Hemoterapia.
Avances médicos
El evento, que contará con talleres de enfermería, mesas científicas y jornadas informativas sobre asociaciones de pacientes, «pondrá en valor» el trabajo desarrollado en el campo de las enfermedades de la sangre, en el que se producen 1.300 ingresos hospitalarios al año y 30.000 consultas externas, según indicó ayer el delegado provincial de Salud, Daniel Pérez.
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Relato íntegro de Carlota
Estas cifras han aumentado un 18%de media en el último ejercicio debido a la cronificación de las patologías por el aumento de la supervivencia gracias a los avances médicos. Esto hace que coincidan más personas enfermas en el tiempo, tal y como explicó la directora de la Unidad de Gestión Clínica Intercentros (UGCI) de Hematología, Ana Isabel Heiniger. Pérez destacó que ya se han alcanzado los 1.070 trasplantes de médula, de los que el 17%se practican a niños.
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