La Junta trabaja en un sistema para hacer públicas las zonas con riesgo de inundación

La última norma urbanística de la comunidad, la Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía, conocida por sus siglas Lista, prohíbe expresamente las construcciones en los dominios de los ríos, tal y como ha recordado la responsable del Ejecutivo regional, que ha insistido en que los alcaldes y alcaldesas tienen en su mano instrumentos para acabar con estas edificaciones, conforme a la legislación vigente y a la doctrina jurisdiccional.

España ha hecho estas declaraciones en Alhaurín de la Torre, donde ha acompañado a su alcalde, Joaquín Villanova, en la visita que ha realizado a uno de los areneros construidos en el término, donde hay 35 en total, para contener la fuerza del arroyo Blanquillo y otros riachuelos cuando experimentan crecidas por las lluvias. Villanova, al hilo de los expedientes de derribo de construcciones en los márgenes de ribera, ha explicado que en el municipio ya se instruyeron más de una veintena, después de las inundaciones de los 90 del siglo pasado, aunque aún quedan tres por ejecutar, a la espera de una sentencia judicial firme.

Después de las últimas lluvias del miércoles, el máximo responsable municipal alhaurino ha hecho también un anuncio, la transformación de una cantera, en desuso y a los píes de la sierra, para que haga de freno a las riadas. La idea sería crear allí un parque inundable, una terreno que tuviera capacidad de inundarse, absorbiendo posibles avenidas de agua, para que luego, esta sea encauzada y permita la regeneración de los acuíferos.

Esta infraestructura hídrica, que ya se ha probado con éxito en ciudades, depende un un proyecto que, como anuncia el Gobierno municipal, estará en marcha en un mes. Gracias a este obra, habrá capacidad para absorber hasta 260 millones de litros de pluviales, ha dicho Villanova.

En cuanto a los daños, la portavoz de la Junta ha apuntado que, una vez que el área de Protección Civil concluya el peritaje de daños en los distintos municipios, la comunidad autónoma activará las ayudas económicas para hacer frente a las reparaciones que sean necesarias en el ámbito de las competencias regionales. España, aunque deslizó que será preciso para ello un fondo mayor que los 80 millones de euros previstos, liberados tras el paso de la DANA de finales de octubre, fue cauta y no adelantó ningún estimación de pérdidas.

En cuanto a la situación de los municipios malagueños más afectados por las lluvias, como Benamargosa, insistió en que, por el momento, poco más se puede hacer que poner los medios materiales y humanos que sean necesarios para agilizar las tareas de limpieza y vuelta a la normalidad.