Capella, el antequerano que crea con sus manos los escaparates más espectaculares de Málaga
Para Navidad, ha montado un circo que será el atractivo para visitar los comercios tradicionales en Antequera
En las poblaciones se mantiene el espíritu navideño que el comercio tradicional ofrece a final de año. A las ofertas comerciales y atractivos publicitarios de ... las grandes cadenas, hay tiendas propias que siguen aportando la magia que heredaron de sus padres. En Antequera hay uno de ellos, Capella Decoración, donde José Carlos Capella Conejo (Antequera, 1970) suele sorprender con escaparates que son capaces de transmitir vida, luz y color. Es lugar de visita obligada, además de pasear por las calles con luces navideñas o establecimientos con Belenes. Al igual que hay un anuncio que inaugura la época navideña; en Antequera, Capella es la estrella que inicia el ambiente por las calles en esta época.
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Cuando abra este lunes 22 por la mañana, quienes pasen por su local de calle Comedias (en pleno centro comercial de la ciudad) se podrán encontrar con el gran espectáculo del circo que ha montado este año. Una creación realizada a mano que contiene seis personajes, un perro y el entorno para ofrecer sus actuaciones. No es la primera vez que sorprende, lo hace cada Navidad, así como en épocas puntuales como el Día del Libro o los cambios de estación. Esta vez ha querido «hacer algo distinto porque este año ha sido el 50 aniversario de nuestra tienda. Quería hacer algo especial, algo que celebrase este año, por eso el hacer un escaparate dedicado al circo con personajes que serán marionetas y una escenografía que recree ese circo en concreto, uno antiguo del siglo pasado».
Ha sido sacar el niño que aún lleva dentro y recordar los cuentos que le leía su padre: «Conservo un álbum antiguo de Dumbo donde vienen escenas de circo, me llamaba la atención por el color, lo llamativo, todo lo de época estilo 'vintage' que se lleva ahora tanto. Me gusta porque tiene color y luz y un escaparate es lo que le hace a una tienda vender, es muy importante».
Sigue con el negocio junto a su hermana y como autónomo, saca tiempo del poco que le queda. «Por eso comencé en agosto, trabajando por las noches, acostándome tarde, y por las mañanas, levantándome a las 6, los fines de semana... Cuando una cosa se hace con ilusión, merece la pena y éste es el resultado, magnífico. Sobre todo espero que a la gente le guste: ¡Eso es lo bonito!».
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El escaparate comenzó a tomar vida en su casa-taller, creando sus propios personajes que los has trasladado este fin de semana a su local comercial: «Todos llevan un nombre con algo que a mí me inspira. El presentador es Walter, por un amigo mío holandés que es pintor, que vive muy cerca de Archidona. Cada marioneta es entera de madera, con material reciclado, va forrada de una masilla especial para este tipo de trabajos, forrada de papel; la ropa está hecha con tela, que me ha ayudado mi madre con la costura. La princesa trapecista es Teresa, una amiga mía a la que quiero un montón. Luego está Chris, la mujer tatuada».
Junto a ellos, «un contorsionista, Spendin, es una revista cultural que yo llevo tiempo siguiendo por internet. El payaso se llama Sol por Antequera. Lleva a su vez otra marioneta en la mano, que es mi galgo Bali». Y el hombre forzudo «es Anthony, que era también muy típico en los circos antiguos y es el nombre de mi pareja, que se llama Antonio, y quise dedicarle a él este personaje. En total son seis figuras... ¡siete con el perro que lleva el payaso!».
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Lo subastará para Cáritas
Ha ido compartiendo la realización de cada detalle por sus redes sociales, por lo que antes de terminarlo, sus seguidores se han interesado por él, preguntando qué haría cuando lo desmontara. «La gente me preguntaba que si estas figuras yo las iba a poner a la venta». Y tras pensar qué hacer con ellas un día se preguntó «¿por qué no subastarlas y que todo ese dinero íntegro fuese para Cáritas? Hay mucha gente necesitada. Cáritas está todo el día colaborando y ayudando a muchísima gente» y es su manera de ayudarles, así como «mi agradecimiento a la ciudad para la gente que ha confiado en nosotros».
Desde este lunes le tocará atender a su clientes y descansar lo que pueda tras cuatro meses intensos. Pero llega una época con movimiento para un negocio donde además de apoyar al comercio tradicional, pide «conseguir tranquilidad para toda la gente que lo esté pasando mal tras la pandemia. Hay muchos, por ejemplo, que por desgracia por esto de la luz que están temiéndole al frío... ¡Hay tantas cosas que la gente necesita y que no nos damos cuenta...!». Por lo que desea que el escaparate ayude a valorar lo que tenemos y querer a las personas cercanas.
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