«No es normal que mandes a tu hija al instituto y la recojas en una ambulancia»

Al llegar, encontró a su hija mayor, de 15 años, tendida en el suelo en una calle aledaña al instituto. Acababa de recuperar el conocimiento que perdió minutos antes, según sostiene la madre, a causa de un empujón que le hizo caer al suelo y golpearse la cabeza. La mujer asegura que la menor y su hermano, de 14, fueron agredidos por un grupo de alumnos y ha presentado una denuncia que ayer hizo pública a través de las páginas de SUR.

Según su relato, que ahora investiga la Guardia Civil de Coín, todo comenzó por un incidente que ocurrió dentro del centro entre su hijo y otro alumno, que supuestamente lo amenazó diciéndole que a las tres, al terminar las clases, le iban a pegar. «Mi hijo salió del instituto tranquilo, acompañado de su tutora, pero vinieron dos chicos detrás y comenzaron a darle puñetazos», cuenta la madre, que insiste en que la docente hizo «todo lo que pudo» por evitar la agresión.

La hermana del menor, que salía del centro detrás de él, intervino para defenderlo al ver que estaban golpeándole, siempre según la versión de la mujer. «Otros cinco chicos se fueron a por ella y le pegaron. Le dieron manotazos, patadas y empujones». Mientras esto sucedía, dos primos de las víctimas trataron de intervenir, pero fueron sujetados por miembros de la pandilla de los supuestos agresores, afirma Cristina Mocan.

Al parecer, uno de esos empujones hizo que su hija cayera al suelo, donde quedó tendida y supuestamente perdió por unos instantes el conocimiento. Una patrulla de la Policía Local de Coín que se presentó en el lugar instantes después de la agresión pidió inmediatamente una ambulancia, que trasladó a la menor al centro de salud y, después, al Hospital Clínico Universitario, donde le realizaron pruebas para descartar lesiones internas. Recibió el alta esa noche. «Mi hija lleva dos días sin ir a clase, le duele mucho la cabeza y la nariz», añade.

La denunciante ha identificado a cuatro de los supuestos agresores, pero asegura que en total participaron nueve menores. Aunque la Guardia Civil está instruyendo diligencias por el caso, pide que el centro también tome cartas en el asunto, «más allá de la expulsión por tres días de uno de los chicos», para que no vuelva a ocurrir. «No es normal que mandes a tu hija al instituto y la recojas en una ambulancia», sentencia.