Mari Nieves Ramírez, la apuesta por la renovación en el PSOE

Las últimas dos semanas de campaña han puesto la vida de Mari Nieves Ramírez del revés. Vive en Torrox y tiene muy interiorizado su apego a este municipio. La política siempre ha abarcado parte de su vida, pero que se coma los días enteros es algo a lo que no está acostumbrada. Por quien más sufre es por su hija pequeña, Lola, a la que apenas ha podido ver en esta campaña. Hablar de hobbies, en su caso, aseguran los que la conocen, es hablar de deportes acuáticos.

En lo político, que haya acabado en el PSOE, parece una consecuencia lógica teniendo en cuenta los antecedentes familiares. Su padrino es Ildefonso Mateos, el primer alcalde que tuvo Torrox en la democracia. Ramírez creció en una familia trabajadora. Es la menor de tres hermanos. Padre, albañil. Madre, ama de casa. El no poder mirar para otro lado ante el mal ajeno, asegura, la llevó a estudiar Trabajo Social en Granada. En esos años crece su vocación política al calor de las protestas contra la guerra de Irak. Llega la afiliación formal al PSOE.

Después de acabar sus estudios universitarios, le llega la primera responsabilidad orgánica, al frente de las Juventudes Socialistas de Torrox. En el 2011, entra como concejala en el Ayuntamiento torroxeño y se convierte en la representante más joven de un gobierno municipal que, entonces, aún ostenta el PSOE. La primera experiencia en gestión le llega al en el área de turismo y playas. Cuatro años después, da el salto al Parlamento, en la última legislatura del PSOE al frente de la Junta.

Una vez finalizada su etapa en Sevilla, su vuelta a Torrox viene acompañada de un ascenso dentro del partido. Se convierte en secretaria general del PSOE en Torrox y se convierte en candidata a la alcaldía en las pasadas elecciones de mayo. Logra mejorar el resultado y pasa de cuatro a cinco concejales, pero no logra arrebatar la alcaldía a Óscar Medina (PP).

No hay mucho lugar para el debate sobre su posición como cabeza de lista. Se entiende mejor si se tiene en cuenta, además, que es la única integrante malagueña en la actual ejecutiva federal del PSOE. El ser siempre una de las más jóvenes al llegar a los sitios de responsabilidad le ha obligado a demostrar que tiene la necesaria aptitud y también el potencial para crecer.

Quien ha trabajado con ella aseguran que es muy meticulosa. Si hay algo que queda por aclarar, no duda en estar disponible a cualquier hora, aunque hace de la conciliación de la vida familiar con el trabajo y la corresponsabilidad una gran bandera. Otro aspecto que define a Mari Nieves Ramírez su fuerte «conciencia feminista». Es algo que tiene en consideración en cada paso y acción que toma.

A tenor de su trayectoria, también es innegable decir que tiene una ambición dentro de la política para seguir escalando. Ha sobrevivido al declive de Susana Díaz, con la que siempre se le vio cercana en el Parlamento. Ha sabido buscar su sitio con Pedro Sánchez. Prueba de ello es que es la única malagueña que forma parte de la ejecutiva federal.