Alejandro Davidovich se desquicia ante un gran Khachanov

Se desquició en muchos momentos del partido Davidovich, quejumbroso con el estado de la pista central del Godó. Llegó a reclamar tres botes irregulares de la bola en la primera manga, el último de ellos en un importante 'deuce' con 4-5, cuando buscaba bola de 'break' para evitar que Khachanov cerrara este periodo. "Esto parece Marrakech", se quejaba en relación al ATP 250 que se disputa en Marruecos.

Ex 'top 10' en 2019, la temporada de Khachanov estaba siendo muy discreta este 2025, pero se está mostrando muy diferente en Barcelona. La calidad latente está ahí. El pupilo de Pepo Clavet se mueve muy bien con sus 1,98 metros y cuando está inspirado es muy peligroso. De hecho, ya había vencido a Davidovich por un doble 6-2 en Montecarlo en 2023, en el único duelo mantenido entre ambos en tierra (había perdido, en cambio, los otros dos cruces, en rápida, en Indian Wells y Paris Bercy).

Davidovich comenzó con un alto nivel de confianza y se vieron ya de salida grandes puntos desde el fondo. Estuvo cerca de superar un 0-40 adverso en el quinto juego, pero no fue capaz, y le pesó mucho desaprovechar otro 0-40, justo después, cuando Khachanov trataba de consolidar la ventaja.

Obligaba una y otra vez el moscovita a jugar incómodo a Davidovich, que como sufrió también en la víspera ante Rublev, no era capaz de consolidar sus 'breaks'. Tras igualar para el 4-4, se dejó otro para el 4-5, y también tuvo una bola de quiebre para evitar que se acabara el set, sin acierto.

«La primera para arriba y luego le cambias con el paralelo, pero convencido. ¡Vamos!», le comentaba Félix Mantilla al rinconero, esta vez más nervioso de la cuenta y sin que la grada barcelonesa, algo fría, se terminara de volcar con uno de los dos españoles que seguían en el torneo. Pese al intento de recuperar la moral de su pupilo, Davidovich no empezó bien el segundo set, 'break' abajo, pero se recuperó enseguida con un regalo a la red del ruso.

Tenía que reaccionar el malagueño, que ya se ha segurado subir otro puesto en el 'ranking' (29º) e ir de cabeza de serie en los Masters 1.000 de Madrid y Roma y en Roland Garros, algo que es muy importante, pero con un nuevo quiebre y el 5-2, tocando ya el tercer set, llegó lo mas inesperado: perdió el hilo del partido. Dispuso de un 0-30 en el juego siguiente, tuvo una bola de set con el 5-3, en un juego en el que fue muy apurado, y también tuvo un 15-30 al resto en el 5-4, pero a medida que se iban las opciones se fue yendo del partido, con errores inexplicables, perdiendo la confianza en su tenis, el que tan buenos resultados le ha deparado este curso.

Al final del choque, ambos tenistas se mostraron enfadados porque Khachanov reprochó a Davidovich su actitud al quejarse del sol en un remate alto, dando a entender que el problema era para los dos jugadores, que fueron cambiando de pista, pero al final entendió las disculpas del malagueño.