La semana clave del Unideba

Hace poco más de un mes, los buenos resultados acumulados del Unideba otorgaron al equipo una plaza para disputar la fase de ascenso a Primera Nacional, la tercera categoría española, a la que sólo acceden los dos primeros clasificados de la competición andaluza. Pase lo que pase este fin de semana, el billete al 'play-off' ya está conseguido.

Las dudas comenzaron a saltar sobre la palestra entonces, al comprobar que a pesar del esfuerzo del equipo el presupuesto no podría hacer frente a una prolongación de la competición. Ante esta situación, la dirección del Unideba comenzó a buscar soluciones. «Hace unas cuatro jornadas ya sabíamos que nos íbamos a clasificar, así que nos pusimos manos a la obra para buscar patrocinadores y ya hemos conseguido más o menos el 50 por ciento del presupuesto», asegura el técnico del equipo sénior, Óscar Martín. Exjugador semiprofesional durante 5 años y que, al igual que su segundo al mando, Rofo Escobar, compagina sus labores técnicas con su trabajo en un hotel de Marbella.

Si entonces llegaron a pensar en la renuncia a este ascenso, ahora la situación parece haber dado un vuelco. El equipo está dispuesto a forzar un milagro para llegar a los 3.000 euros que prevén que costará esta fase, que se disputará del 9 al 12 de mayo y reunirá a los equipos mejor clasificados de Andalucía, Madrid, Castilla La Mancha, Canarias, Ceuta y Melilla, de entre los cuales sólo subiría uno. Las dos plazas de ascenso restantes saldrán de los vencedores de los grupos de la parte norte.

Un aspecto importante a la hora de detallar el presupuesto para esta fase de ascenso será la elección de la sede. El 3 de abril concluye el plazo para que los candidatos realicen sus propuestas de organización y Martín asegura incluso que se llegó a valorar la posibilidad de que Málaga fuese anfitriona, aunque las cifras se excedían demasiado, por lo que sólo queda esperar a que el destino sea cercano, en Atarfe (Granada), por ejemplo.

Sólo volver a disputar este 'play-off' ya supondría un salto de calidad para el conjunto, el único representante malagueño de la categoría andaluza y, en el hipotético caso de darse su ascenso, también el único costasoleño de la Primera Nacional. Un equipo que sobrevive por las cuotas de las propias jugadoras, las ayudas de algunos patrocinadores locales y una subvención del Ayuntamiento de Málaga, además del convenio que mantiene con la UMA, gracias al que pueden entrenarse y competir en sus instalaciones deportivas de Teatinos.

Este conjunto es la cabeza visible de una cantera con más de 350 alumnos entre distintas escuelas por puntos repartidos de la provincia y hasta ocho equipos federados y en competición, desde la categoría alevín. Todos ellos femeninos, dado que estas componen, según el técnico, hasta el 85% de la cantera, aunque desde la base se fomente como un deporte para ambos géneros.