Luis Portillo intenta este martes el doble cruce a nado del Estrecho por el cáncer infantil

Portillo tomeó la salida sobre las siete de la mañana desde la Isla de las Palomas, en la costa gaditana de Tarifa, según informó la Asociación Cruce a Nado del Estrecho de Gibraltar (Acneg), organización encargada de la prueba y de la asistencia técnica y la seguridad del nadador. Sobre las 10.00 horas Portillo ya había superado la segunda hora de travesía y antes de las dos de la tarde el nadador malagueño ya había tocado Punta Cires, completada la ida de 15 kilómetros en tres horas y 28 minutos.

La distancia que Portillo debe cubrir en el doble recorrido entre Tarifa y Punta Cires, en Marruecos, es de aproximadamente unos treinta kilómetros,aunque variará en función de las corrientes marinas, las condiciones meteorológicas que se vayan produciendo y de la propia orientación del nado durante la travesía. Para completar el reto, Portillo estará acompañado en todo momento por una embarcación de la organización así como por una zódiac que velarán por la seguridad del nadador durante la prueba.

El tiempo estimado por el propio Portillo es de en torno a unas ocho horas. «Es como una jornada de trabajo que afronto con muchos nervios pero también con muchas ganas; el cáncer infantil es un golpe que nos puede tocar a cualquiera y estos niños se merecen todo el esfuerzo», ha declarado el nadador esta mañana, en las horas previas a un reto para cuya preparación ha realizado de 25 a 30 kilómetros semanales en el agua durante los últimos meses.

Hasta el momento, el Desafío Las Dos Orillas ha logrado recaudar 4.880 euros para la Fundación Olivares a través de la plataforma de crowdfunding, donde quienes quieran contribuir a esta causa pueden seguir comprando brazadas para este reto, cuya donación irá directamente a la fundación.

Los interesados en seguir la prueba, además, podrán hacerlo a partir de las siete de la mañana desde la página web https://www.marinetraffic.com/

Luis Portillo es en la actualidad policía local en Benahavís. Exnadador absoluto en el Real Club Mediterráneo, fue un consumado espaldista que ya de veterano volvió a la natación, con especial dedicación a las aguas abiertas, con las que ahora afronta este reto para la Fundación Olivares, la organización malagueña que atiende a medio millar de niños con cáncer y sus familias.