Manuel Alcántara, verso a verso

El propio editor de la obra, el profesor de la Universidad de Málaga y director de la colección Ciudad del Paraíso, Francisco Ruiz Noguera, explicó los avatares que fueron retrasando la publicación, «pero nunca es tarde y aquí está». Por ello no dudó en presentar 'Mar de fondo' como un libro «necesario», ya que recoge toda la poesía publicada por el poeta y articulista malagueño. Así, estas obras completas ocupan el número 11 de la «selecta» colección poética del Ayuntamiento, coincidiendo y celebrando el 30 aniversario de esta serie literaria, que une a Alcántara con grandes compañeros de estrofas, como José Antonio Muñoz Rojas, Rafael Pérez Estrada, María Victoria Atencia, Alfonso Canales o Pablo García Baena, entre otros.

Como ellos, Alcántara se acercó al mundo y a sí mismo a través de la poesía. Y lo expresó de manera admirable, honesta y cercana en composiciones como 'Biografía' en el que confesaba su verdad literaria: «Sí. Miradme a los versos. No os engaño». Precisamente, esta pieza de su primer libro, 'Maneras de silencio' (1955), no solo presenta una voz literaria propia, sino que establece y «sustenta su trayectoria poética», como explicó Ruiz Noguera, ya que están presentes la memoria y el olvido, el amor, el existencialismo y el concepto del tiempo. El editor de la colección, autor también del texto introductorio de esta poesía reunida, recordó precisamente la «madurez» con la que irrumpió Alcántara en el panorama literario de los años 50 y su capacidad para integrar en sus versos las dos corrientes encontradas de los autores de la época: la poesía del conocimiento y la de la comunicación.

Editada con lujo y mimo, 'Mar de fondo' es el tercer libro que ve la luz tras el fallecimiento del maestro Alcántara el pasado mes de abril, a los 91 años. Aunque estos tres volúmenes se fraguaron en vida del poeta e incluso contaron con su intervención. Así pocos días después de su pérdida, el Centro Andaluz de las Letras publicó 'El porvenir de ayer es ya recuerdo', una antología que recogía las dos almas del escritor, el Manolo periodista y el Alcántara poeta. Antes de verano salió a la luz 'Llave de los recuerdos', otra cuidada selección de la obra en verso del autor malagueño a cargo de la Fundación Unicaja y que incluía además un poema inédito que casi sonaba a despedida al rescatar uno de los grandes temas de su poesía desde el propio título: 'El tiempo'.

Esos versos, junto a otros no publicados en libros y que estaban destinados al poemario inédito que llevaba años preparando, 'Últimas consecuencias', son los que cierran precisamente 'Mar de fondo', que también le concede un protagonismo especial a uno de los poemas indispensables de la obra alcantariana: 'Niño del 40'. Así, cuando se abre y se cierra el libro se encuentra el lector con la versión escrita a mano por el propio autor de estos magnéticos y nostálgicos versos que también hablan de ese tiempo pasado que impregnaba todo su pensamiento literario: «No se estaba ya en guerra aquel verano, / mi padre me llevaba de la mano, / yo estudiaba segundo de jazmines».

El alcalde de Málaga, al que también acompañaron en la presentación el director de la Fundación Manuel Alcántara, Antonio Pedraza, y la concejala de Cultura, Noelia Losada, se refirió a otra de las versiones de este último poema, ya que se lo escuchó «recitar varias veces al propio Alcántara». 'Niño del 40' formaba parte del último libro publicado por el autor en 1985, 'Aquel verano en Málaga' y explicó que este poema lo situaba claramente como un poeta de la Generación del 50. Una pieza en la que tampoco faltan las referencias al mar y su «simbología de misterio, muerte y vida a la vez», expresó Ruiz Noguera . «Por eso le he puesto este título al libro, porque el mar no solo fue el telón de fondo de su obra, sino incluso de su vida», afirmó el responsable de la colección 'Ciudad del paraíso' que recalcó que el volumen dedicado a Alcántara reúne por primera vez «los puntos cardinales de su poesía». Una obra que tiene vida propia y que nunca llega tarde. Como dijo el editor: «Bienvenida sea su palabra».