Un viaje a la Málaga antifranquista

Uno de aquellos arrestados era José Coriat, entonces estudiante en la Facultad de Económicas de Málaga y perteneciente, como otros de los detenidos, a la organización Joven Guardia Roja, el ala juvenil del Partido del Trabajo de España, quien ha recogido aquel episodio en el libro 'Memoria de una detención. Nosotros no matamos a Carrero Blanco', editado por Ediciones del Genal. Una obra que este miércoles fue presentada oficialmente en la Sociedad Económica de Amigos del País por el catedrático de la Universidad de Jaén Antonio Martín Mesa -que también fue detenido aquellos días- y por el exdelegado de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía Ignacio Trillo.

«El libro cuenta la detención, encarcelamiento y juicio de algunos estudiantes, militantes comunistas, que lucharon contra la dictadura. Es una crónica novelada de unos hechos reales que reivindica esa parte de la memoria histórica», relata Coriat en conversación con este periódico. Es una novela donde, el autor, además de contar los acontecimientos y «el miedo y la tensión» vivida, hace un recorrido y una descripción de la Málaga de aquella primera mitad de los años setenta: su incipiente turismo, sus bares, la universidad, los barrios, los movimientos de la lucha antifranquista o cómo era la cárcel por dentro y qué tipo de presos se encontraban entonces cumpliendo condena. Además, recoge una parte documental con los autos de procesamiento y las multas que le impusieron a los detenidos, que oscilaron entre las 50.000 y las 100.000 pesetas de la época.

Sobre los recuerdos de aquellos días, José Coriat narra la detención, en su domicilio, por parte de la Guardia Civil y su traslado al cuartel que la Guardia Civil tenía en Segalerva. «Estuvimos allí tres días. El primero de ellos nos enteramos de que habían asesinado a Carrero Blanco. Ese hecho hizo aumentar la tensión que ya vivíamos y el miedo», rememora. En este sentido, el autor explica que en el libro cuenta una historia «cercana, contada sin adornos y donde se mezclan escenas que recuerdan la dureza del franquismo, que reprimía sin miramientos cualquier oposición al régimen» y paralelamente introduce algunas anécdotas que «contribuyen a disminuir el dramatismo del relato».

Un libro con el que Coriat recuerda y rinde su particular homenaje a quienes lucharon contra la dictadura de Franco y con el que pretende animar a quienes vivieron historias similares que «aún permanecen ocultas», a publicarlas.