Javier Calleja ficha por Almine Rech, una de las galerías más importantes del mundo

«Sí, es un motivo para estar contento, pero ahora toca seguir trabajando», ofrece Calleja. Varios botones de muestra sirven para poner en contexto ese paso crucial en la trayectoria del artista malagueño. Para empezar, la galería de Almine Rech tiene sedes en París (dos espacios distintos), Bruselas, Londres, Nueva York y Shangái. Pero, sobre todo, la trascendencia del fichaje viene dada por su nómina de autores. No en vano, entre sus representados figuran artistas como Jeff Koons, Richard Prince, Julian Schnabel, Joel Shapiro, Sylvie Fleury, Ryoji Ikeda y Franz West. Sólo un español vivo aparece en esa lista: Miquel Barceló.

«Una de las razones por las que me siento tan orgulloso de este paso es justo esa: los compañeros de viaje que voy a tener en esta aventura», brinda Calleja (Málaga, 1971), que apuntala más si cabe su protagonismo en la escena internacional del arte contemporáneo. El acuerdo entre Javier Calleja y la galería establece la representación en exclusiva del artista malagueño en Europa, Reino Unido y Nueva York.

En el horizonte compartido a partir de ahora entre Calleja y Rech surgen una presentación en Shangái en el próximo mes de mayo y una exposición individual prevista el año que viene en París, donde Rech cuenta con dos galerías.

Con más de tres décadas de trayectoria con su propia sala de proyección internacional, la galerista es cofundadora junto a su marido, Bernard Ruiz-Picasso, de la Fundación Almine y Bernard Ruiz-Picasso para el Arte (FABA), creada en 2002 y estrecha colaboradora del Museo Picasso Málaga desde sus orígenes.

Tanto es así, que FABA y el museo malagueño han firmado dos comodatos que han dado lugar a las dos colecciones de larga estancia que han podido verse en el Palacio de Buenavista en los últimos años y que en la actualidad cristaliza en el montaje 'Diálogos con Picasso', desplegado en el museo malagueño hasta 2023.

Junto a la incorporación de Calleja a la nómina de artistas representados por la galería Almine Rech, el artista malagueño ultima otra novedad en su trayectoria: su primera incursión en el grabado. Para la ocasión, ha tomado como maestro a Francisco Aguilar, alma máter del Taller Gravura, donde Calleja ha desarrollado la colaboración con la plataforma Avant Arte.

Se trata de una carpeta con tres grabados de la que se ha previsto una edición de 75 ejemplares y cuyo lanzamiento está programado para el próximo mes de junio. «Quería traerme el trabajo a casa, en el sentido literal, pero también figurado. Hacer la producción de la obra aquí y no fuera como en otras ocasiones. Paco (Aguilar) es un maestro increíble y me lo he pasado genial trabajando con él. He aprendido muchísimo«, comparte Calleja.

¿Una nueva vía creativa?, ¿un campo abierto en el mundo del grabado? «Bueno, paso a paso. Hay que seguir aprendiendo y trabajando«. La prudencia de Javier Calleja.